Juan Carlos Fernández Fasero, Director de Comunicación Publica de la SGAE, asegura que Araceli tiene que pagar por poner la radio en su local, porque "hay música de fondo durante las entrevistas o el programa de radio, que incrementa el valor del negocio y hacen más agradable el hecho de estar allí". La tarifa que tiene que pagar Araceli al mes no se puede comparar a lo que paga una discoteca. El precio del canon no superaría los seis o siete euros al mes.
En la SGAE advierten de que ellos no sancionan. Sin embargo, si vuelven a descubrir a Araceli escuchando la radio en su local, como ya la han avisado, pueden reclamarle que pague todo lo que no ha pagado desde que fue advertida por primera vez.