Sarah Fuller es una chica de 21 años que juega al fútbol americano desde que tiene 5 años. No obstante, este sábado ha hecho historia al convertirse en la primera mujer en jugar un partido en un equipo masculino de la popular liga universitaria (NCAA), es decir, de las cinco grandes conferencias de universidades que se conoce en Estados Unidos como el 'Power Five'.
Fuller es portera del equipo femenino de fútbol de la Universidad de Vandervilt, donde también estudia medicina. Tras ganar la liga con su equipo, el entrenador de los Vanderbilt Commodore, Derek Mason, la llamó porque tenía muchas bajas por coronavirus en su equipo y necesitaba a un pateador (o kicker) para el partido de este fin de semana. Y Saráh no se lo pensó dos veces.
La jugadora eligió lucir para el partido un casco con el lema “Play like a girl” - Juega como una chica -. Aunque perdieron, Fuller declaró que estaba "emocionada". "El hecho de poder representar a las niñas que quisieron hacer esto o pensaban en jugar al fútbol o a cualquier otro deporte. Seguro que las anima a salir para hacer algo grande como esto. Es increíble".
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