La inmigración ha vuelto a la actualidad por las cesiones que el gobierno comprometió la semana pasada para sacar adelante diferentes normativas. El último padrón dice que España está habitada por 48 millones de personas de las que seis millones tienen nacionalidad extranjera, casi el 13%.
Sabemos que las estadísticas encierran medias que contribuyen a tapar realidades. Así, mientras la inmigración no llega al 4% en Extremadura, se acerca rápidamente al 20% en Baleares o Cataluña.
Si metemos más la lupa encontramos situaciones muy llamativas. En el municipio de Barcelona, por ejemplo, los extranjeros son el 24% de la población. Pero si miramos el tramo de edad entre 20 y 39 años, cuando los humanos somos más productivos y reproductivos, su peso sube hasta el 44%, casi la mitad. En Madrid capital ese porcentaje ya está en el 30%.
La demografía explica casi todo, también por qué Junts se preocupa ahora por esta competencia.