Buenas noches al Boletín Oficial del Estado, en concreto a la sección de erratas. Porque el que tiene boca se equivoca, el que escribe se proscribe y hasta la palabra de ley puede tener una errata.
BOE eres la colección de diarios más conservada y más consultada por el estamento del país. Eres el único lugar en el que cabe el marismo legislativo de esta nación de naciones. Ahora, en competencia con los boletines de las autonomías.
Algunas erratas han hecho historia. Cuando se creó el Consejo del Poder Judicial, dice la leyenda, que se notificó como Consejo del Joder Judicial. Pero la de hoy es insuperable, es el viejo chascarrillo elevado a categoría de orden ministerial. Leo textualmente la corrección: "En la columna nombre donde dice "digo" debe decir "Diego".
Si el Boletín fue creado en 1661 ha tardado 460 años en hacer algo parecido a lo que dijo Suárez, hacer normal en el Boletín lo que a nivel de calle es normal. Querido amigo, donde digo "digo", no digo "digo" que digo "Diego".