Opinión en LA Brújula

La carta de Ónega al viceministro de Exteriores polaco: "Habría que llamarle a usted chivato mentiroso"

Fernando Ónega dedica su carta en La Brújula al viceministro de Asuntos Exteriores de Polonia que ha querido denunciar en la Unión Europea la reforma del PSOE y Unidas Podemos para la renovación del CGPJ.

Fernando Ónega

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Buenas noches al señor viceministro de Asuntos Exteriores de Polonia, Pawel Jablonski. Muy señor mío: ha tenido usted el detallazo de denunciar a España ante la Unión Europea con una frase que suena así en castellano: "el gobierno polaco pregunta a la Unión Europea si intervendrá a España por la reforma del Consejo del Poder Judicial como hizo con Polonia".

Es una actitud muy propia de un militante del partido que gobierna Polonia y que se llama Ley y Justicia, pero sus siglas en polaco son Pe i Ese, PIS, aunque habría que añadir que fuera del tiesto. Tan fuera del tiesto, que habría que llamarle a usted chivato mentiroso.

Mire, viceministro: a muchos españoles tampoco nos gusta la ley que perpetrarán los partidos del gobierno español. Pero entre lo que hizo el gobierno del PIS y lo que hace el de España hay alguna diferencia. La reforma del PIS consistía en castigar a los jueces que dicten sentencias contra su gobierno. De su Tribunal Supremo hicieron un instrumento de control político de la magistratura. De control político, señor Jablonski. Es decir, que ustedes hicieron PIS literalmente sobre la Justicia.

"Acusica de baja estofa"

No es extraño que cientos de miles de personas salieran a la calle hace diez meses a reclamar la independencia judicial. Aquí todavía no se ha llegado a eso, aunque una parte de la clase política y periodística utilice palabras de condena que parecen, bueno, parecen y son, condena de una dictadura. Y su gesto, viceministro, si representa a su gobierno o habla en su nombre, no es elegante, ni amistoso, ni justo. Es, ya digo, el de un acusica de baja estofa que le dice al profe europeo: mire a España, señoría, que también hace cochinadas.

Le encantaría que nuestro país les acompañase a ustedes como Estado dudoso de ser Estado de Derecho. Así tiene usted de contenta a la extrema derecha española, que le jalea en las redes sociales. Incluso habría quien celebrase lo que usted sugiere: un gran correctivo para España. A ser posible, un chantaje con los Fondos Europeos. Buen papel para el número dos de la diplomacia polaca. A eso en España le llamamos hacer amigos. Habrá que crear una asociación con este nombre: "Amigos del PIS".