Desde su llegada al Ministerio de cultura, Ernest Urtasun ha dejado claro que la ideología no será ajena a la gestión del patrimonio cultural nacional. El ministro de SUMAR arrancó su discurso de toma de posesión solidarizándose con el sufrimiento de la población palestina, alertando de las guerras culturales que impulsan en Europa gobiernos ultraconservadores y asumiendo como tareas de su ministerio garantizar la libertad de expresión, impulsar la igualdad y la pluralidad lingüística.
En su primera comparecencia ante la Comisión de Cultura del Congreso de los Diputados, Urtasun hizo un anuncio que adelanta una gestión polémica. Lo de "descolonizar" los museos no es una ocurrencia del ministro, la idea ya se empezó modelar en tiempos de Felipe González a cuenta del V Centenario del descubrimiento de América.
Y no es algo exclusivo de España, países como EEUU, Francia, Reino Unido o Australia llevan tiempo revisando sus colecciones para ofrecer la visión de los pueblos de los que proceden los bienes expuestos. Aunque Urtasun no ha detallado sus planes descolonizadores.
Javier Santamarta, escritor, periodista y divulgador histórico, considera que el problema no es la palabra colonial, sino determinar "dónde acaba el proceso de descolonización".
Para Santamarta lo "más gracioso" es que Urtasun se ponga a hablar de los aspectos de la colonización y "de pronto, de estar hablando del museo arqueológico nacional, pasa a la edad moderna tras la conquista de América, ¿qué pasa con los árabes?"