El Congreso de los Diputados ha rechazado hoy las enmiendas a la totalidad presentadas contra La ‘Ley Trans’. Pero el debate ha vuelto a poner en evidencia las discrepancias en el seno del Gobierno. Las diferencias ideológicas entre el PSOE y Podemos vuelven a chocar con esta norma que ha llevado al Parlamento la ministra de Igualdad, Irene Montero, y que defiende la libre autodeterminación de género.
Según Podemos, esta ley permitirá que cualquier persona, independientemente de su sexo, pueda cambiar su nombre y su género en el DNI sin necesidad de presentar informes médicos, ni ningún otro requisito y sin la autoridad de los padres a partir de los 16 años.
Algo que no ha convencido mucho a la parte socialista del gobierno, donde hay quienes defienden que esta nueva ley podría suponer un ataque al feminismo; como la ex vicepresidenta Carmen Calvo.
Y en esta línea, agrupaciones como la Asociación Española de Feministas Socialistas se presentaron ayer en las puertas del Congreso junto a otras mujeres, para exigir que se paralice la tramitación de esta ley, porque podría poner en peligro los derechos de las mujeres conseguidos hasta ahora.
Por su parte, Podemos explica que esta ley permitirá reconocer a cualquier persona trans su derecho de ser quienes son, sin necesidad de hormonarse o sin informes médicos que señalan que tienen cualquier tipo de enfermedad.
El profesor catedrático de Filosofía del Derecho en la Universidad Autónoma de Madrid, Pablo de Lora señala en La Brújula que "la Ley Trans, lo que va a suponer es que en el futuro no se van a poder dar buenas razones para el trato diferenciado de los individuos. Especialmente de los hombres."
