Jorge del Palacio nos acerca hoy a un personaje histórico de la política de Estados Unidos que puede explicar a Trump a pesar de que tratarse de un demócrata, Andrew Jackson.
El profesor de Historia del Pensamiento Político apunta que cuando nos referimos a Trump, lo hacemos como una persona "poco sofisticada en lo intelectual", pero que "deberíamos tomar en consideración cuáles son referentes intelectuales" y su "fuente de inspiración".
Nos explica que Jackson fue el séptimo presidente de los Estados Unidos, con el que se cierra "el ciclo de los presidentes que fueron los fundadores, que de, alguna manera, compartían un universo intelectual" y que, al mismo tiempo, "eran capaces de armonizar esas ideas ilustradas con una gran desconfianza frente al pueblo". Jackson rompe con esa dinámica y "levanta la bandera del pueblo para hacer política".
Del Palacio que destaca cuatro innovaciones que introdujo Jackson en la política estadounidense. Primero, incluyó la idea del candidato "que se tiene que crecer ante la adversidad", después el concepto del outsider, el clientelismo y por último, se rodeó de un grupo de asesores que eran, principalmente, periodistas y panfletistas que se encargaban de ensalzar lo que hacía el presidente.
Considera que la razón por la que Trump reivindica la figura de Jackson es porque ha hecho "una asociación selectiva de los elementos que interesan". "Este tipo de mitologías políticas no tienen tanto que ver con la historia real sino con el simbolismo que se trata de extraer para legitimarse", argumenta.