El bajo crecimiento de Europa se está convirtiendo en una preocupación mundial. En el primer trimestre, el PIB de Estados Unidos crece el doble que en la Eurozona y cuatro veces más que el Reino Unido.
El problema es que esta mayor velocidad de crecimiento de EEUU con respecto a Europa se lleva arrastrando años y amenaza con cronificarse con la implantación de la Inteligencia Artificial.
Larry Fink, presidente de BlackRock, la mayor gestora de fondos del mundo y accionista relevante de grandes empresas españolas, decía la semana pasada que la IA va a dejar ganadores y perdedores, y que veía con optimismo a Estados Unidos y con preocupación a Europa, donde el riesgo de quedarse atrás en el pelotón de los perdedores es enorme.
Fink aseguraba que una economía fuerte necesita un sector bancario fuerte y a la vez un mercado de capitales vibrante. "Si Europa quiere ser competitiva no puede tener más regulación que Estados Unidos", añadió.
La regulación es imprescindible, pero en su dosis. Si te pasas, es puro veneno.