EN LA BRÚJULA

El cuaderno de Chapu: "Hay que tener un ángel de la guarda, pero hay que tenerlo bien entrenado"

El cuaderno de Chapu con las notas que ha apuntado del día.

ondacero.es

Madrid | 03.07.2023 23:30

Traigo apuntado que, como a la moto había que ponerle un nombre, le puse Princesa Ana, porque era inglesa y porque la princesa Ana lo mismo te cuadraba un batallón de marines que montaba un poni en la caza del zorro. Mi princesa Ana servía lo mismo para ir a la ópera que para subir a la palomera con la bota vino y un trozo de queso en el morral.

Pero las princesas también tropiezan y la bella Ana resbaló en una cochina mancha de aceite y salimos a bailar en un baile violento e impredecible. Después todo era pensar en los niños, dolor, calor, sed y preguntas de si sabía quien era, cuántos dedos hay aquí, “¿Me ves?”, preguntó la médico: “Soy May”. “Hola Soy May”. Querida May, Abel y Rubén, os debo un pintxo.

Después vino la noche en urgencias y la vigilia mezcló el fuego en París, los pinchazos, las sumas de encuestas con el sonido de esos aparatos que hacen tu-tu-tu en su lamento traumatológico verde de esperanzas remotas y naranja desinfectante.

Se jodieron el perú, el hombro izquierdo y los encierros de Pamplona. No es lo mismo la cama que la camilla ni que en la Santo Domingo te toque cabestro que cabestrillo, pero chico, hubo capotico de San Fermín y hay que tener un ángel de la guarda, pero hay que tenerlo bien entrenado como el mío. A un navarro de Falces que vivía en una cueva, se le cayó la casa encima y cuentan que salió ileso y cuando le preguntaron dijo: “No es que hay un Dios, es que hay cuatro o cinco”.