Traigo que el Supremo se ha pronunciado sobre los indultos a los políticos presos en un documento de 21 páginas. Poesía. Me intento aprender citas para impresionar. Me gusta mucho esta en la que está el cogollo: El asunto de los indultos, se refiere el tribunal, “ofrece la singular perspectiva de que algunos de los que aspiran al beneficio del derecho de gracia son líderes políticos de los partidos que garantizan la estabilidad del Gobierno llamado al ejercicio de la gracia”. Esto parece que lo ve hasta la Justicia, que es ciega.
El Gobierno le va tomando los bajos a los pantalones del muñeco poniendo al lado de indulto palabras hermosas... redondas. Concordia, magnanimidad, nuevo tiempo. En Moncloa hace un tiempo que les susurran los discursos las musas del mañana.
Hablemos de la Gracia. Me contaba mi padre que los domingos por la mañana mi abuelo lo despertaba con los discos de Concha Piquer e iba por la casa gritando “Qué gracia tiene esta mujer”, y mi padre pensaba “Si está todo el día llorando!”.
La gracia es una de las palabras más polisémicas de nuestro idioma. El diccionario da más versiones que José Luis Ábalos. Dar las gracias, caer en gracia, gracias a Dios, año de gracia , tiro de gracia y maldita la gracia. Sánchez es un presidente muy agraciado. La gracia es el ingenio, el duende y algo muy esquivo que no se sabe si está o no, de manera que en Andalucía si te dicen que eres muy gracioso, en realidad te están llamando idiota.
