Traigo apuntado que al fin María Guardiola cederá una consejería de Extremadura a Vox pese a que prometió que nunca lo haría. Esto según Sánchez no es mentir, sino cambiar de posición, y así es cómo Sánchez viene a salvar al PP de sus incoherencias. Esto te lo arreglan Zapatero y Patxi López en dos ruedas de prensa. Ahora Zapatero parece el quinto Beatle, o el nuevo Papa, dando la absolución a la gente de la izquierda socialista. El truco consiste en que la gente piense que si ZP quiere a Sánchez, la gente también puede quererle. Es como entrevistar a la madre de un condenado. Yo creo que Zapatero como mentor de Sánchez, no es que arregle ele sanchismo, sino que hunde el zapaterismo. Por todas partes aparece Sánchez dando la versión de los hechos. En los bancos de los jubilados, en las vallas de las obras, en loe hormigueros, en las colas de la discoteca está Sánchez explicando por qué le va a ir mal en las elecciones.
Pero qué es ese ruido que se escucha, es Guardiola bajándose de la burra, hay chaparrones de gente cayéndose del guindo, pasando por el aro y comulgando con ruedas de molino y con lo que haya que comulgar. Cuando a Robin O Connor le cogió un toro en fiestas de Lodosa y lo abrió en canal, su amigo Fernando Ardura se lo encontró con las tripas fuera. Andaba a gatas, palpando el suelo buscando las gafas. “Las, gafas, las gafas”, murmuraba. Fernando le encontró las gafas y se las metió en el bolsillo, y lo cogió en brazos. Cuando Robin se vio lo que llevaba, miró a Fernando y le dijo: “Fernando, no me quiero morir”, a lo que Fernando respondió: “Robin, eso hay que pensarlo antes”.
