Los fondos de capital riesgo están invirtiendo en la educación española intensificando la compra de grupos educativos nacionales y buscando altas rentabilidades en un sector en plena transformación.
"En los últimos ocho años han comprado más de 56 colegios en España", ha asegurado Sonia Díez. La tipología de los colegios que están comprando son privados y preferentemente internacionales, repartidos entre las regiones del Madrid, Andalucía y el Levante. La procedencia de estos fondos son británicos, americanos y suizos.
La psicóloga ha preguntado: "Si está descendiendo la natalidad y si se estima una pérdida del 23,4% de alumnado en los próximos 20 años, ¿Qué hace esta gente invirtiendo tantísimo dinero?"
Según Díez, estos fondos internacionales están saturados de efectivo. Además, buscan volumen de negocio y previsibilidad, abriéndose a otros mercados. Es por ello que, en España, buscan invertir en colegios que ofrecen títulos europeos por un tercio del coste de los títulos que se ofrecerían en otros países, para abrirse al mercado asiático y latinoamericano y traer estudiantes a España.
"Se están consolidando las plataformas de toda la cadena de valor del proceso productivo y educativo, desmenuzando los servicios educativos y convirtiéndolos en empresas. Hay un volumen de negocio muy grande", ha alertado la experta en educación.
El sector privado en España tenía muy poca formación y tradición como empresa. Sin embargo, estos fondos están ofreciendo hasta un +17% del precio sobre el ebitda, lo que ofrece la garantía de unos inmuebles. "Si a esto le unes que los padres buscan ofrecer una mejor educación y mejor competitividad en el mercado laboral, se crea una tormenta perfecta para que se vendan muchos colegios privados en España", ha argumentado Sonia.
¿Qué supone la venta de colegios privados en España?
"Existen evidencias de que hay mejor gestión en el sector educativo privado que en el público. El hecho de que busquen generar dinero les hace capaces de generar mejores resultados por su gestión, por la eficiencia en el proceso y por la centralización de recursos. Traen aires de libertad al sector con buena capacidad de negociación", ha reconocido la psicóloga.
Sin embargo, Díez ha destacado que hay que poner el foco en que no hay una relación identitaria entre los colegios privados porque no aportan un grupo educativo sino un grupo de servicios educativos: "No hay un compromiso educativo con un objetivo final que este vinculado a la educación", ha concluido.