"Hemos explicado perfectamente por qué consideramos que no es conveniente firmar este acuerdo dentro del monólogo social del Ministerio de Trabajo, con un montón de veces que nos daban ultimátum", ha dicho Garamendi en 'La brújula', donde ha explicado la ruptura del diálogo con Trabajo por la reducción de la jornada laboral: "Se ha alargado el chicle lo posible para alargar un debate político en el que no entramos. Claro que defendemos la propia negociación colectiva, el artículo 37 de la Constitución".
Garamendi ha comentado que desde la CEOE cumple y "de repente llama el Ministerio y dice señores, vamos a dialogar", haciendo una comparación con el fútbol: "Dicen 'vamos a jugar un partido, ustedes saltan, van a perder 5-0, el árbitro va vestido del equipo contrario y sin ningún motivo', esto es así".
El presidente de la patronal defiende que "no salten por los aires los convenios colectivos" y afirma que hay "una obsesión por regular absolutamente todo", generando "una falta de confianza enorme": "Es un problema muy serio y especialmente duro contra las pequeñas empresas".
Por ello, Garamendi considera que la clave es la "inversión", pero que en este momento no se dan las condiciones: "La confianza es definitiva para la inversión. Pedimos que haya acuerdos de Estados. No puede ser que las minorías marquen el ritmo tan importante", ha dicho, en referencia al acuerdo agónico del impuesto a la banca, el que ha calificado como "una barbaridad" por ser "un impuesto a la carta": "No se aplica sobre beneficios, a unos les cobran de una manera y a otros de otra. Perderá la gente más desfavorecida, las que no van a tener el acceso al crédito. La culpa es de este impuesto".
Por último, sobre las noticias de una fusión entre BBVA y Sabadell, Garamendi señala que serán los accionistas los que tengan que decidir lo que ocurre: "Tengo respeto por los dos bancos. Mi obligación es defender a los dos, así que respeto profundamente los criterios, ahí está esa opción y son los accionistas los que tengan que decidir".