José Manuel Albares, ministro de Exteriores de España, explica en La Brújula que en el seno del Gobierno no ha habido un cambio de opinión en cuanto al envío de armas, sino una evolución: "No es un cambio es una evolución como está pasando en todos los países europeos. El ataque ilegal de Rusia ocurre súbitamente y sobre la marcha todos los estados de Europa estamos tomando decisiones. El domingo de manera urgente nos reunimos los ministro de Exteriores y España sumó su voz a la de enviar material defensivo a ucranianos civiles desarmados para que pudieran defenderse.
"Solo somos partidarios de la paz, diálogo y que vuelva la vía diplomática. Putin escala en esta guerra irracional día a día. Alemania en muy pocos días pasó de pensar que la mejor forma de ayudar era no mandar material militar y 48 horas después mandar material militar. No hay rectificación", añade sobre este asunto.
Reconoce que las sanciones impactarán en la economía europea, sin embargo, cree que es un coste mucho menor que el que hubiera supuesto no aplicarlas: "Es muy difícil saber lo que tiene Putin en su irracional cabeza. Si cree que puede ganar la guerra económica a la UE se equivoca. Este desafío lo va a ganar Europa y la paz. Su fallo de cálculo ha sido pensar que no íbamos a estar unido. Va a haber un coste en Europa pero nada comparable con lo que está pasando en Rusia. No tomar sanciones hubiera sido todavía más costoso para Europa".
Asegura que Putin ya había hecho maniobras de este tipo, y en este momento, la reacción no se podía hacer esperar: "Es una guerra ilegal. En la ONU hay una resolución contundente condenando a Rusia. Esto es una espiral de Putin y ya no esperamos más. Para Putin es inadmisible que Ucrania quiera ser uno más de la familia europea. Cada estado es autónomo para tomar sus decisiones y no vamos a permitir que la decisión irracional de Putin ponga fin a eso".
Enviar armas directamente a Ucrania ha impactado de lleno en la estabilidad de Unidas Podemos, donde la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, que conocía desde ayer la medida, ha apoyado a Pedro Sánchez frente al rechazo de los morados. Ione Belarra, que conocía también desde ayer esta medida por boca del ministro ha salido del hemiciclo acusando a España y a la UE de no estar haciendo "todos los esfuerzos que deberían para reforzar las vías diplomáticas". Señala Albares que "todos están unidos por la paz. En cualquier Gobierno hay matices pero todos rechazamos la guerra de Putin".
Sobre los españoles que siguen en Ucrania, se compromete a que vuelvan aunque reconoce que no va a ser sencillo: "Queda un centenar de españoles en toda Ucrania. En cuanto se den las condiciones de seguridad van a regresar. No les vamos a abandonar. Por avión será difícil. Por vía terrestre es más viable pero, quiero ser franco, en estos momentos, está lejos". Respecto a los españoles en Rusia, el ministro asegura que son 3.000. "No hay indicios de que haya riesgos para ellos en estos momentos y les tengo muy en mente. No vamos a escatimar esfuerzo para traerles a España si fuera necesario".