Lo peor que puede pasar en una boda es que a uno le planten en el altar. Los novios, el BBVA y el Banco Sabadell, se han parado en la puerta de la iglesia. Puede haber más oportunidades.
En cuatro bodas y un funeral hay funeral pero al final hay enlace. La fusión entre el Sabadell y el BBVA ha temrinado en divorcio antes de tiempo. Una de las razones es que el canje de precios no cuadraba. Otra el reparto del poder en la nueva entidad. De cualquier forma, habrá más bodas.
El Sabadell se plantea vender su filial en el Reino Unido y el BBVA estudia otras operaciones internacionales. Incluso aumentar su participación en un banco turco.
En el viernes de Black Friday, los comerciantes se juegan su futuro. Por delante tienen mes y medio con la máxima esperanza en un año que a muchos les ha dejado en la ruina.