La esperpéntica votación de la Reforma Laboral no ayuda a la imagen de la clase política ni al mercado de trabajo. Tampoco ayuda que la ley saliera adelante por un voto generado por un error.
Una encuesta de Infojobs advierte de que la mitad de los españoles no conocen el contenido de la Reforma y a este paso, con la tangana política, menos. La tinta de calamar de la política, la estrategia de la confusión lo envuelve todo. El Gobierno saca a pasear el término “tamayazo” por el cambio de voto de los diputados de UPN y de paso tapar que estos diputados votaron lo mismo que sus socios ERC o Bildu, no. Mientras el PP saca a pasear el término prevaricación. Del mercado laboral, del paro, de la temporalidad se habla poco, una mala noticia.
La Reforma Laboral sigue adelante con tensión y con tensión interna en el Gobierno entre los negociadores, entre Yolanda Diaz y Félix Bolaños. La Ley ha salido adelante pero de una manera poco gratificante
El mundo sigue. A la chita callando ha regresado la prima de riesgo. En un solo día ha subido a 83 puntos básicos. Esto es debido a que se ha abierto la puerta a un incremento de los tipos de interés. Un precio del dinero más elevado encarecería la financiación de la deuda pública. España es el país de la UE donde más deprisa ha aumentado la deuda pública durante la crisis. Y la inflación no da respiro. El Banco de España calcula una inflación media del 4% cuando el precio del petróleo no ayuda. Se vuelve a disparar y supera de largo los 92 dólares.
La inflación pone de los nervios a los inversores y también a los empresarios. Los datos de la afiliación a la Seguridad Social también indican una caída de los pagadores. Ahora hay 78.000 empresas menos que antes de la pandemia. La mayor parte de las empresas desaparecidas son pymes, son microempresas de 5 o menos trabajadores. La pandemia ha dejado tocado el tejido empresarial más débil
La vida es una tómbola que decía Marisol, Pepa Flores, que hoy cumple años. Nunca sabes por donde va a salir el día. Aumenta la volatilidad con fuerte incremento de beneficios en la banca, en Naturgy y en Amazon que contrasta con los derrumbes de Facebook, de Meta, y es que la vida no es un metaverso, o quizá sí.
