Poco a poco, Pere Aragonés va desgranando su propuesta de Soberanía Fiscal, de Pacto Fiscal para Cataluña. Una especie de Cupo Vasco, con una solidaridad limitada en el tiempo y con una supervisión sobre el resto de las Comunidades Autónomas.
Aragonés es consciente que su oferta de recaudar la Generalitat con el 100% de la recaudación supondrá una merma considerable para el Estado. Aragonés propone reducir el perímetro del Estado. El Gobierno dice que cualquier negociación será con todas las autonomías, insiste la titular de Hacienda y número dos del PSOE, María Jesús Montero y niega que Cataluña esté mal financiada y acusa a sus socios de mala gestión.
Pero, la propuesta de Aragonés donde ha sentado como una bomba de fragmentación ha sido en las Comunidades Autónomas. Los barones socialistas también se apuntan a rechazar el Pacto Fiscal a la catalana, el primero en manifestarse ha sido el presidente del Principado de Asturias, Adrián Barbón.
Aragonés dice que cuando ellos proponen algo al principio se le critica pero después los demás dirigentes territoriales se ponen a la cola y ofrece como ejemplo la condonación parcial de la deuda.
A todo esto estamos en vísperas de la presentación de las cuentas del Estado del pasado año. No hay presupuestos, pero sí que hay que explicar cómo han ido los ingresos y gastos. Mañana la titular de Hacienda se deberá poner los manguitos de contable y explicar cuánto ingresó el Estado el pasado año y cuánto gastó. Es la ejecución presupuestaria. Los ingresos crecieron por el consumo, la actividad, el empleo, pero también por la inflación. Un maná para las arcas públicas y más cuando no se deflactó la tarifa del IRPF. El presidente ha adelantado que 2023 cerró con un déficit del 3,7%, dos décimas menos de lo previsto. Hacienda busca fórmulas legales para mantener los tributos especiales a la banca y a las energéticas.
La Reserva Federal estadounidense se queda donde está. La FED ha dejado el precio del dinero en el nivel máximo desde inicios de siglo. Entre el 5,25% y el 5,5%. Pero, la FED abre la puerta a los cambios. Habrá tres rebajas este año, ese es el programa. Y con las flores de mayo llegará la primera bajada, según los analistas. Veremos. En el BCE la cosa va más lenta. Siempre a rebufo. Lagarde dice que el mes clave será el de junio.
Y no habrá que esperar al verano para ver los hoteles españoles llenos. Esta Semana Santa llega con alta ocupación y empleo. Las Agencias de Viajes esperan un aumento de negocio turístico entre el 5 y el 10%.. Y esto se traduce en más puestos de trabajo. Un informe de Randstad apunta que se van a firmar 116.200 contratos, se recupera y se supera así, por fin, el nivel de 2019. Andalucía, Cataluña y Madrid concentran casi el 50% de las plazas.
