Ferruccio Lamborghini era un mecánico durante la Segunda Guerra Mundial que se convirtió en un industrial de éxito en Italia, fabricante de tractores, los tractores amarillos de Lambo.
Ferruccio comentó a su amigo Enzo Ferrari la conveniencia de un nuevo sistema de frenado. El dueño de la marca del cabalino rampante lo desdeñó, diciéndole que qué sabría él de coches, un simple fabricante de tractores. A lo que Ferruccio indignado contestó creando los fantásticos superdeportivos Lamborghini...
Los Lamborghini llevan rodando desde los años 60 y una de sus características es que buena parte de sus modelos llevan nombres relacionados con la tauromaquia. El modelo más famoso es el Miura, pero también están el Murciélago o Diablo. Estos dos últimos toros indultados en la plaza. Y algo debe tener Lamborghini, porque ha sido indultada por la crisis generada por la pandemia. Lamborghini ha aumentado sus ventas un 20% en el primer trimestre del año, de tal forma que ha firmado los tres mejores meses de su historia.
Lamborghini no es la única que aprieta el acelerador. También China, que en el primer trimestre del año ha incrementado su PIB un 18 con 3%. Y aún así, los analistas esperaban un aumento del 22% en comparación con el hundimiento del trimestre del año pasado, los tres peores meses de la pandemia de la Covid en el gigante de la gran muralla.
En España el motor no termina de arrancar con brío. Es cierto que la confianza empresarial mejora, pero también es destacable que según el barómetro de los gestores, casi la mitad de las pymes españolas no podrán acceder a las ayudas públicas de 7.000 millones de euros al no estar al corriente de pago con Hacienda y la Seguridad Social. Están ahogadas y lo estarán más aún.
Y ahora el PSOE se quiere bajar del coche de la subida de impuestos. Nadia Calviño vuelve a insistir en que no es el momento para una subida fiscal. Pero es que la ministra Reyes Maroto, lo mismo. La que sería vicepresidenta de Madrid, si Gabilondo gana las elecciones, claro, afirma ahora que hay otras palancas aparte de subir impuestos. Freno de mano a tope a la armonización fiscal, al menos hasta que pasen las elecciones en Madrid.