Hoy voy a comenzar hablando de Leonardo di Caprio, del actor, el de Titanic, Infiltrado, el Aviador, El Gran Gatsby o, también, el protagonista de Diamantes de Sangre
Hablamos de diamantes sintéticas, nada que ver con las gemas que terminaban financiando las guerras civiles en el Golfo de Guinea. Leonardo Di Caprio es uno de los inversores de Diamond Foundry, la compañía que plantea levantar en Trujillo una fábrica de Diamantes artificiales, industriales. El caso es que la Junta de Extremadura espera una inversión de casi 700 millones de euros y 300 puestos de trabajo.
El PP y el PSOE han decidido centrar su batalla electoral en el ámbito fiscal. Creen que puede ser una mina más productiva que las kimberlitas de Sudáfrica. Núñez Feijóo propone bajar el IVA al 4% en los alimentos más comunes. El Gobierno rechaza la idea y prepara subidas fiscales selectivas mientras la vicepresidenta Calviño acusa al PP de cortinas de humo
Y encima ya vamos apretados en la aprobación de los Presupuestos y hay diferencia entre los socios de Gobierno. Yolanda Diaz afirma que no hay todavía acuerdo por las diferencias en la vivienda y en los impuestos.
La OCDE cree que Alemania se desliza hacia la recesión. España crecerá este año incluso más de lo que espera el Gobierno, avanzará un 4,4%. Pero el año que viene llegan las tijeras y solo se crecerá un 1,5%, aún así, si se cumplen las previsiones se evitará la recesión. Y eso que De Guindos advierte de la desaceleración y su jefa Lagarde insiste en la subida de tipos de interés. Esto cuando todo el mundo esperaba un terremoto a lo Vesubio en las bolsas europeas tras la victoria de Meloni. Todas en rojo menos la italiana de Milán y la de Londres y eso que la libra esterlina sigue de capa caída y se hunde.
Regresan los fantasmas del 92 con la libra. Y como comenzábamos con Di Caprio terminamos también con él. Con el Lobo de Wall Street. Hay mucho cánido suelto en la City
