EN LA BRÚJULA

El monólogo de las ocho: "Si Bildu puede imponer medidas es normal que le vaya bien en las elecciones"

Rafa Latorre reflexiona en su monólogo sobre las listas de Bildu y la campaña electoral.

Rafa Latorre

Madrid | 15.05.2023 20:22

Comprobado que Bildu no sale de la escena electoral desde que se descubriera que llevaba medio centenar de etarras en sus listas, según a quien se le pregunte en el PSOE opta por una estrategia: Huida, Rechazo o Negación.

Empecemos por la primera, que es la que ha adoptado Ferraz, entendido como la ejecutiva federal. Hoy ha tomado una decisión insólita, que es suspender la comparecencia posterior a la reunión de la ejecutiva y la ha sustituido por eso que vulgarmente se conoce como un grabazo. ¿La razón? Eludir las preguntas de los periodistas, que son incómodas. Así que Pilar Alegría, portavoz, se ha grabado un monólogo en plano fijo, no sabemos si con prompter o sin él, y luego han enviado la lata con el argumentario a las redacciones para su emisión.

Los que se juegan en estas elecciones, que son los candidatos, atendiendo a la sociología electoral de sus feudos han adoptado la estrategia del rechazo. Esto lo encarna como nadie Emiliano García Page, que este fin de semana decía ante Pedro Sánchez, en el único mitin que ambos van a compartir hasta el 28M, aquello de que él no iba con los de Bildu hasta la vuelta de la esquina. Esta estrategia adolece de una cierta falta de credibilidad pues lo cierto es que Bildu tiene escasa implantación en Castilla La Mancha y en cambio allí donde el PSOE lo ha necesitado, ya sea en Navarra o el Parlamento nacional lo ha convertido en socio prioritario.

Si le permites capitalizar leyes sociales es normal que luego le vaya bien en las elecciones a las que se presente con su medio centenar de etarras en las listas

Hoy quien ha hecho penitencia es el barón aragonés, Javier Lambán, que según las encuestas lo tiene algo más complicado que Page para revalidar su mayoría. Hoy ha estado con Carlos Alsina en Más de uno y está bien algo que ha dicho porque combate uno de los argumentos más molestamente persistente. Esto de: «¡Es que son legales!». Hombre ya, pero nadie te obliga a pactar con ello, sobre todo porque eso tiene una consecuencia muy beneficiosa para Bildu. Evidentemente si tú le permites capitalizar leyes sociales, presentar la ley de vivienda, hace alarde de utilidad y de capacidad para imponer medidas, pues lo normal es que luego le vaya bien en las elecciones a las que se presente con su medio centenar de etarras en las listas.

Y ahora la negación. Esta declaración de Juan Lobato, que es la más original de cuantas ha dispensado la campaña socialista. En su descargo hay que decir que al menos trasluce una cierta mala conciencia. Al menos no se dedica a proferir teorías sobre lo beneficioso que es integrar en las instituciones a gente como Dienteputo o Cheroqui. Tampoco se agarra al hecho de que las listas sean legales. Opta por la negación, que es un cierto aliviadero psicológico de la conciencia, pero poco real desde luego. Toda una legislatura de sociedad parlamentaria estable como para que Lobato no se haya enterado.

¿Qué dice la oposición? Bueno, sobre lo que le parecen las listas de Bildu y su sociedad con el PSOE hay un criterio unánime. Sobre lo que hay diferencias es sobre lo que habría que hacer con Bildu como partido. Vox ha instado desde hace tiempo a su ilegalización. Núñez Feijóo no quiere ir tan lejos pero sí sugiere que la Abogacía del Estado y la Fiscalía actúen para evitar que asesinos concurran en las listas de un partido y si no pudiera porque no tienen herramientas legales para ello, que se hagan las modificaciones legislativas pertinentes.

Más lejos que él ha ido la presidente de Madrid y candidata a revalidar el cargo, Isabel Díaz Ayuso, que sí considera que se puede actuar para que Bildu deje de ser legal si se acredita una complicidad semejante con lo que ETA ha sido.

Pedro Sánchez está hoy en Vitoria. Muy oportuno, porque le será difícil eludir el tema más incómodo para él y para los candidatos socialistas en la campaña. Que es que lejos de reducirse la presencia de etarras en las listas de Bildu,se han multiplicado después de haber convertido a este partido en socio prioritario de su gobierno.

Alberto Núñez Feijóo está en Asturias, que en lo que se refiere a las autonómicas es la comunidad más complicada a priori para el Partido Popular, porque las encuestas le mantienen la mayoría a Adrián Barbón.

Yolanda Díaz está hoy en uno de los feudos fuertes de la izquierda de la izquierda en Madrid. En Rivas Vaciamadrid vivió Pablo Iglesias e Izquierda Unida ha obtenido sucesivos éxitos electorales. Rivas, Patxi Linaza