EN LA BRÚJULA

El monólogo de las ocho: "Casi da miedo imaginar la exposición de motivos de la ley de amnistía"

Rafa Latorre reflexiona en su monólogo sobre la jura de Leonor, el Rey y la Constitución y la foto de Santos Cerdán con Puigdemont.

Rafa Latorre

Madrid | 31.10.2023 20:15

Hace ya 18 años, en que los periodistas esperaban apostado a las puertas de la clínica Ruber para recibir noticias del alumbramiento de la primogénita de los reyes. La niña que estaba destinada a heredar la Corona de España. Era una madrugada de frío y lluvia en Madrid, era octubre. Y a eso de las dos de la madrugada ahí estaba la radio para contar la noticia.

Es muy gracioso escuchar estos días a quienes denuncian que hay una operación urdida para garantizar la sucesión del Rey en su hija Leonor. Sí, sí, claro. Esa operación comenzó en el momento mismo que acaban de escuchar y se llama monarquía, que es hereditaria. Lo que hoy ha ocurrido es ni más ni menos que un paso más para la princesa Leonor, que ha cumplido 18 años, y también es un rito necesario para la democracia española.

Porque lo que ha hecho la futura jefa del Estado es declararse consciente de cuáles son sus deberes y sus compromisos. Lo que ha hecho Leonor es someterse a una liturgia que encierra todo el significado de una monarquía parlamentaria, que puede gustar o no gustar, pero lo que es un hecho es que el sistema que rige en algunas de las democracias más estables y avanzadas del mundo.

Poco después de las 11 de la mañana, la princesa recorría en coche la calle Mayor en dirección a la Carrera de San Jerónimo, vestida de blanco, acompañada por sus padres y su hermana la infanta. La verdad es que ha sido bastante pródiga en gestos de afecto con ellos. En el Congreso reinaba una atmósfera bien distinta a la que acogió a su padre cuando se sometió al mismo rito de jura de Constitución en 1986.

Si España ya es otra de la de hace 18 años, cuando nació, imagínense cuánto ha cambiado de la de hace 37 años. Basta contar las mujeres presentes entonces en el Congreso y sobre todo cuál era su función.

Y sin embargo hay mucho que permanece desde entonces, lo fundamental, que es precisamente lo que Leonor se ha comprometido a preservar.

Lo fundamental que prevalece es la soberanía nacional

En un día como el de hoy, especialmente en un día como el de hoy, tienen una especial resonancia las palabras pronunciadas por el rey Felipe VI ya en el comedor de gala.

Lo fundamental que prevalece es la soberanía nacional, que es la carta de propiedad de los españoles sobre su nación. Esa que impide por ejemplo, que nadie decida por ellos lo que a todos ellos compete. A ver, así un ejemplo a vuelapluma, imaginemos que un grupo de ciudadanos quiere amputar una parte del territorio para independizarse. Pues es la soberanía nacional lo que lo hace inconstitucional.

Soberanía nacional, que no soberanía popular, que esta una confusión que desde hace tiempo tratan de colar todos los que pretenden reformar la Constitución por la puerta atrás. Lo que sorprende es que nada menos que la presidenta del Congreso, tercera autoridad del Estadio, lo confunda y aún peor si lo utiliza mal a sabiendas. Es que Francina Armengol, comenzaba su discurso de esta gloriosa manera: "Bienvenidos y bienvenidas a las Cortes Generales, sede de la soberanía popular". Luego el discurso ya fue confirmando frase por frase que no tiene demasiado clara cuál es su función de representación de la Cámara y no de un grupo parlamentario de la Cámara.

Hoy es un día desde luego muy pertinente para recordar lo que es la soberanía nacional y todas estas sutilezas constitucionales, porque hoy toda la conversación política gira en torno de una fotografía que resume el estado de la nación. La del número 3 socialista, Santos Cerdán, mendigando los votos de un fugitivo de la Justicia para conseguir una prórroga en el poder para su jefe, Pedro Sánchez.

Casi da miedo imaginar lo que dirá la exposición de motivos de la ley de amnistía

Casi da miedo imaginar lo que dirá la exposición de motivos de la ley de amnistía si el secretario de organización del PSOE ha estado durante una hora reunido en el despacho del fugitivo con un mural sobre sus cabezas de la turba adorando una urna del 1 de octubre.

Esto también incomoda a algunos socialistas. Pocos desde luego se atreven a expresarlo. Nadie con la elocuencia de Felipe González, que hoy ha hecho trizas al bueno de Santos Cerdán con apenas un par de palabras.

Claro, es que le preguntan por si se haría una foto semejante y él responde ¿Por quién me toma? Solo le faltó añadir, usted se cree que yo soy como Santos Cerdán. Lo cierto es que hace falta tener poca consideración de uno mismo para retratarse de esa guisa con un prófugo de la Justicia. Pero, lo que sea por la investidura, fin en sí mismo para el PSOE realmente existente.

Si Puigdemont exige el pago por adelantado de sus votos seguramente Pedro Sánchez apurará los plazos,

Porque González le dice a los periodistas, oiga, que yo también soy el PSOE. Sí, pero lo cierto es que el PSOE con función orgánica se levantó el fin de semana para aplaudir al presidente que defendió una amnistía que prometió que jamás defendería y hoy los militantes siguen votando en una consulta que le dará manos libres para concederle lo que sea necesario a los independentistas a cambio de su investidura.

Sí hubo uno que al menos no se levantó a aplaudir. Es ya el díscolo oficial, porque su posición es francamente exótica dentro del partido. Sí, es el barón socialista Emiliano García Page. El castellanomanchego augura que habrá que soportar fotografías aún peores.

Bueno, no sé si hay tiempo para pronunciarse porque todo va a gran velocidad. El viernes se reúne la junta de portavoces y la mesa del congreso y puede que entonces se fije al fin una fecha para el pleno de investidura. No hay demasiado tiempo, aunque es verdad que si Puigdemont exige el pago por adelantado de sus votos seguramente Pedro Sánchez apurará los plazos, el límite es el día 27 de noviembre. ¿Habrá investidura? Bueno, cabe pensar que una fotografía como la de Santos Cerdán es un punto de no retorno, pero a saber…