Qué nervios, eh. En unas horas cada casa cumplirá con el rito anual más feliz, que es este de atravesar el pasillo en dirección al salón para descubrir lo que los Reyes allí hayan dejado. Esta es una noche de insomnio para los niños y también de cierto trajín para los padres, que tienen que ocuparse de que mantengan la calma y permanezcan en sus camas, que los Reyes Magos son trabajadores muy celosos de su método y nos les gusta que les vean trabajar.
Es una maravillosa noche de misterio que en realidad arranca bien temprano porque durante han estado llegando Sus Majestades Los Reyes a cada unos de los ciudades en la clásica parada diplomática en la que están siendo recibido por una multitud enfervorizada, ahora les vamos a contar cómo ha transcurrido y cómo está transcurriendo.
De hecho las autoridades han recomendado a quienes noten los síntomas de alguna enfermedad respiratoria que no se mezclen con la muchedumbre. Es que esta temporada de gripe se ha complicado porque la gente ya no se vacuna tanto de la Covid, por la bronquiolitis de los niños, porque está proliferando de forma feroz los virus respiratorios. Tanto es así que la presión hospitalaria ya se está sintiendo y hay varias comunidades que han decidido recuperar la obligatoriedad de la mascarilla en los centros sanitarios.
Otra vez, la mascarilla. Bueno, por el momento sólo en centros sanitarios, sólo para proteger a los trabajadores que ya bastante tienen con el pico de contagios, pero es verdad que trae algunos recuerdos muy desagradables de la pandemia. En cualquiera caso, no estamos en esa situación, la afecciones no son tan graves y ya hay una población adiestrada para enfrentarse a los virus respiratorios, pero la ministra de Sanidad Mónica García le va a pedir al Consejo Interterritorial la recuperación a nivel nacional de la mascarilla en determinados ámbitos