Lo de intervenir en el derecho de la información es una vieja obsesión de Pedro Sánchez. Y se preguntarán ustedes… cómo se puede medir el interés de Sánchez por algo.
Miren, es fácil. Basta con ver qué es lo pregunta el CIS a los ciudadanos. Donde otros echaban a volar globos sonda, Sánchez envía encuestadores. José Félix Tezanos no es un personaje secundario en la biosfera sanchista. Más bien es un personaje crucial para seguir la trama de este serial. Ahí en el CIS es donde uno puede identificar cuáles son los desvelos, intereses y obsesiones de Sánchez.
En la pandemia ya alarmó que el CIS consultara a los españoles por su disposición a ser informados únicamente por fuentes oficiales. ¿Para qué quiere saber eso Tezanos? En la conversación pública aparecía continuamente la necesidad de regular el flujo de información para evitar los bulos y las fake news. Y la trampa era la misma que hoy: se mezclan las trolas más groseras con informaciones veraces para que nada sea creíble.
Ahora Sánchez reitera la necesidad de intervenir en los medios de comunicación. Lo hace con frases vagas pero con la melodía reconocible de que es necesario drenar la cloaca. Otra vez utiliza la misma trampa: los mezcla todo, disparates absolutos con informaciones veraces para que nada sea creíble. Y habla de digitales, y de webs, sin concretar…
Mire no hay nada más antiguo que hablar de periódicos digitales, todos lo son. Si lo que pretende es desacreditar las informaciones de El Confidencial sobre Begoña Gómez, lo que tiene que hacer es desmentirlas. Y no puede porque son verdad.
En cuanto a la confianza que merece la intervención del Gobierno sobre los medios. Basta ver cuál es la imparcialidad de aquellos que no necesitan ser intervenidos porque ya están intervenidos por el Gobierno. Como son los medios públicos. O instituciones públicos que han pasado de cumplir un servicio a estar al servicio, no ya de un Gobierno, sino de un partido y de las obsesiones de su secretario general, como el CIS.
Es que Sánchez ha vuelto con fuerzas tan renovadas que ni siquiera atisba el final de su mandato. Hoy le decía a Ángels Barceló que si le elegían para un nuevo mandato, que él estaba con ganas para años. Qué habrá encontrado en su reflexión de cinco días, en su retiro monacal, para que ahora le parezca que vale tanto la pena lo que antes describía como una penuria insufrible.
Quizás es que confía en que sacará adelante sus planes para garantizarse una estadía más plácida en la Moncloa. Esos planes apuntan a los medios y a los jueces, que son los miembros de esta santa alianza conservadora que se interpone ante su proyecto de progreso.
En lo que se refiere a los medios, veremos un crudo enfrentamiento entre los paladines de la información y los malvados desestabilizadores del gobierno de progreso. Ya lo verán ustedes, no hace falta ser adivino para anticiparlo. Y en cuanto a los jueces, si atendemos a lo que hoy decía tras el Consejo de Ministros la portavoz Pilar Alegría… el concurso de ideas ya ha comenzado.
En realidad todos estos debate ya le habrán servido a Sánchez para algo. Él va a las entrevistas y nadie le pregunta por las informaciones relativas a su mujer. Y es una oportunidad extraordinaria para desmentir lo que quiera desmentir y para corregir lo que quiera corregir. Si aquí la principal confusión es la que describe al presidente del Gobierno como a un inerme ciudadano. Cuando basta que lo pida para que le hagan una entrevista en cualquier medio, porque es el altavoz más privilegiado del país. Puede convocar a los medios cuando quiera.
Qué clase de oposición se van a encontrar los planes de Pedro Sánchez. Feijóo saca de nuevo al PP a la calle, anuncia que llevará al CIS a los tribunales y un plan de "transparencia" para la familia de los presidentes. Hoy ha reunido a los grupos parlamentarios del PP en el Congreso y el Senado para informarles de cómo combatirá el intento de Sánchez de hacer un cambio de régimen por la puerta de atrás.
El Partido Popular ya ha registrado la comparecencia de Pedro Sánchez en el Senado. Lejos de achantarse tras la performance de Pedro Sánchez endurece algo más su labor de oposición y facilitará que el presidente se someta a un debate en la cámara donde el PP tiene mayoría.
En la Comisión de investigación del Senado hoy comparecía Santos Cerdán, secretario de Organización del PSOE y el hombre al que le debemos que Koldo García haya llegado al corazón del Partido Socialista.
Le han preguntado por la frecuencia con la que se veían y confirma que era una relación muy estrecha la suya. Y ha contestado a una de las grandes cuestiones de la trayectoria como militante de Koldo. La noche que pasó junto a los avales de Pedro Sánchez en las primarias de 2017.
