Pablo Casado que sigue empeñado en mantenerse en la presidencia vuelve a acceder a las presiones y convocará un congreso extraordinario tal como le llevan pidiendo desde el fin de semana los barones y la guardia pretoriana. Muy de mediada. Lo hará en la reunión de la Junta Directiva del martes que viene, que ya sabe usted que la había convocado el lunes pero la cambió después de la protesta de Juanma Moreno Bonilla en Twitter porque coincidía con el Día de Andalucía.
De modo que sí cede al Congreso igual que ha accedido, después de que le insistieran y también fuera de hora, la cabeza de su hombre de confianza. Teodoro García Egea ha dimitido como secretario general del PP. Ya no es que esté libre de toda sospecha es que ya no ejercerá ese cargo. Le había mandado Casado a contestar a la bomba de retardo que les devolvió Ayuso. Hoy parece haberle ordenado dimitir y así lo ha hecho en un movimiento desesperado y tardío de mantenerse en la presidencia por parte de Casado.
Que es, insisto lo que está detrás del anuncio de convocatoria del Congreso extraordinario pero va tarde. Vuelve a ir tarde. Casado desolló a lo que le recomendaban que no se enfrentara a Ayuso. Finalmente se detuvo tarde ante la inminencia de las elecciones de Castilla y León. Casado respondió tarde a la denuncia de Ayuso de extorsión a la que la habían sometido. Su reacción fue atacar tarde y mal a la presidenta de Madrid.
Es tarde para tomar decisiones que debían haberse tomado antes
Después, ya tarde reaccionó y trató de dar por zanjado el incidente como si así pudiese desandar el camino de presión sugerido tras el aborto de espionaje. Hoy ha vuelto a ejercer todo tarde. Es tarde para tomar decisiones que debían haberse tomado antes. O no tiene medida del tiempo y la realidad de su situación o le falta energía para tomar las decisiones cuando han de ser tomada.
Lo cual quizás abunde la percepción de que si las crisis demuestran el verdadero carácter de las personas en esta que se está revelando, vemos una profunda inconsistencia política. Duda demasiado para liderar y rectifica tanto que hace pensar que va a la desesperada intentando a toda costa lo imposible de no caer. A ver como se trabaja mañana la sesión de control del Gobierno. Hay bofetadas por las sillas de primera fila.
Feijóo ya parece intocable en su emergente liderazgo
Desde el lunes y el martes han dejado tan solo a Casado como reforzada la figura de Feijóo. Ya nadie cuestiona que será quien comande la salida de la crisis cabe pensar que optando a la presidencia en el próximo congreso. Otra cosa es que sea el candidato a la presidencia del Gobierno. No tiene porque ir una cosa atada a la otra.
Puede presidir el partido pero seguir con Galicia con mayoría absoluta tan ricamente y el nuevo PP elegir un candidato a presidencia del Gobierno. En todo caso Feijóo ya parece intocable en su emergente liderazgo y hasta él mismo ha reconocido hoy más disposición aún que la que ayer mostraba.
