Pedro Sánchez se ha venido arriba. Ajeno a la polémica de AstraZeneca que es responsabilidad de la Unión Europea y a los retrasos y problemas en la vacunación que es competencia de las Comunidades ha prometido "la luna de la vacunación masiva y más allá". Ha dicho que es "la planificación más conservadora", es decir, un esto como poco. "Cualquier compatriota que lo desee podrá ser vacunado en este periodo", ha afirmado Sánchez.
Y otra afirmación. El objetivo es que no se prorrogue más el estado de alarma. "Va todo tan encarrilado que hasta las previsiones del FMI son buenas", dice Lucas que puntualiza que no dice que los datos están muy por debajo de lo que planificó el Gobierno, ni que el crecimiento es de los mayores porque la caída ha sido de los mayores, ni tampoco que la previsión de paro que calcula el FMI es la mayor de las economías avanzadas con un 16,8 por ciento este año.
Por mucho que se airee el optimismo oficial por la llegada de vacunas, los expertos coinciden en que nada nos salva de la cuarta ola. Y en cuanto a la economía, la recuperación, depende de que el proceso de vacunación se enderece.
La batalla de Madrid
Y en "la batalla de Madrid", Ayuso trata de mantener su hegemonía y crecer en apoyo, la izquierda recuperar sus posiciones. Manuela Carmena en Más de Uno ha lanzado el mensaje de que la izquierda no supo salir del cauce de sus partidos. Ayuso ha tanteado la posibilidad de traer la vacuna rusa. En su declaración sobre la explicación se ha dirigido al Gobierno, es decir a Pedro Sánchez, "su adversario en la batalla por Madrid", apostilla Lucas.