María Sajarova no sabe a qué parte del Gobierno español creer: duda entre la parte que dice que hay democracia en España y la que no. Es la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores del Gobierno de Vladimir Putin. Habla en nombre de un Gobierno de dudosa calidad democrática para poner en solfa la calidad democrática de un país de la Unión Europea como es España gracias al vicepresidente de España Pablo Iglesias Turrión. La quejumbrosa esquizofrenia de Iglesias empieza a ser más que molesta, un problema serio para España. Para la patria de la que se llena la boca cuando las palabras se quedan en el aire como las promesas que nadie va a exigir cumplir.
" La vergonzante aclaración de que España es una democracia"
El Gobierno ha intentado justificarse y ha dicho que es porque estamos en plena campaña electoral catalana. María Jesús Montero ha tenido que volver a afirmarse la vergonzante aclaración de que España es una democracia. ¿Si lo de Iglesias es una declaración electoral, por qué tanta aclaración? Lo de Iglesias esta vez sí ha hecho daño. Rusia se ha permitido poner en duda la democracia española. Ha cargado de munición a la Rusia de Putin en su inacabable disputa con la Unión Europea. Carles Puigdemont, un delincuente fugado de la política española, convertido en héroe del exilio por Pablo Iglesias, se ha permitido dar lecciones de responsabilidad democrática a la UE en el Parlamento Europeo.
Lo de Iglesias es una disputa nuclear, de principios y concepto democrático que traspasa nuestras fronteras y que emite señales que empiezan a perjudicar gravemente el prestigio de España.
Juan Ramón Lucas también ha tenido unas palabras para Carlos Alsina, que ha recibido el premio al Mejor Periodista de 2020 por la Asociación de Prensa de Madrid. La situación de asfixia de la hostelería y los datos de fallecidos por el COVID en España también están en el foco del presentador de La Brújula.
