Los expertos aseguran que para finales de diciembre y principios de año del 2021 se empezarán a distribuir las vacunas contra la Covid-19 por todo el mundo. Mientras tanto, los ensayos para acabar con este virus dependen de esos voluntarios que apuestan por el futuro y dejan su salud en manos de la ciencia.
Ernesto Herrera es uno de los 200 voluntarios que ahora mismo hay en Madrid y que están testando una de esas vacunas para medir con su reacción el resultado. "Yo lo hago encantado, cada uno estamos jugando un papel distinto y esta ha sido mimanera de arrimar el hombro", cuenta.
El voluntario no quiere que se le vea como un héroe porque "hay muchos otros y él quería estar a la altura de la labor social que ellos hacen". Además, cuenta que su mujer padeció un cáncer de mama "muy agresivo" y esta es una manera de "agradecérselo a la ciencia".