Olivier Vilain de la Figuera, presidente de la sección de apnea de la Federación Española de Actividades Subacuáticas, habla sobre el 'Blue Hole' de Dabad en Egipto, un agujero de 95 metros de profundidad al que se puede acceder "andando literalmente" lo que lo convierte "en una auténtica Meca tanto para lo buceadores como para los apneistas".
Estos agujeros acuáticos son una especie de cráteres que se formaron durante la última glaciación que se inundaron con las aguas del mar, cuando empezaron a ser agujeros submarinos.
El presidente de la sección de apnea cuenta que se pueden producir accidentes, "sobre todo porque se pierde la noción de la profundidad a la que se está", aunque reconoce que les "fascinan" porque "sus condiciones son maravillosas".