Diversos estudios demuestran el 30 por ciento de la población española padece problemas estomacales. Un dato bastante significativo considerando el hecho de que todos los malos hábitos, alimenticios o no, producen un gran impacto negativo sobre nuestros estómagos. De hecho, las funciones estomacales trascienden el procesamiento de los alimentos ingeridos, motivo por que cual, además de cuidar nuestra alimentación, debemos velar por la salud de nuestro sistema nervioso central.
Así lo explica, Ángela Quintas, la experta nutricionista que presenta ¿Por qué me duele la tripa? en 'La rosa de los vientos'; un libro con el que ayudará a identificar, entender y reparar las enfermedades del aparato digestivo y en el que, además, compartirá recetas y menús específicos para cada patología.
¿Por qué me duele la tripa?
"Entender qué es la microbiota, cómo actúan las bacterias, qué alimentos te sientan bien y por qué, cómo combatir el colon irritable o la hernia de hiato, qué debes saber de los probióticos antes de usarlos o qué platos te ayudan a adelgazar sin pasar hambre" son solo algunos ejemplos de los muchos temas que aborda. No en vano, el estómago es considerado el segundo cerebro del ser humano.
La nutricionista explica que el tubo digestivo dispone de una red neuronal que puede funcionar de manera independiente al sistema nervioso central y autónomo, y que resulta esencial en la regulación de la función motora del tubo digestivo. Es por eso que la mala gestión de algunas emociones o algunos problemas psicológicos más severos pueden derivar en síntomas gastrointestinales como dolor abdominal, diarrea, hinchazón, náuseas o pesadez.
Sin embargo, lejos de retóricas científicas, la nutricionista ofrece respuestas asequibles para identificar patologías relacionadas con los dolores de tripa u otras molestias digestivas. Y es que, además de las malas digestiones, una mala alimentación puede tener mucho que ver con cambios de humor, algunos problemas de piel y con dolores de cabeza que aparentemente carecen de explicación.