El pasado lunes 4 de octubre el mundo se paralizó durante casi seis horas con la caída de Whatsapp, Instagram y Facebook. Pudimos comprobar lo que significa un monopolio puesto que primero se fue Facebook, pero después cayeron todas las aplicaciones que beben del gigante.
Las caídas de estos servicios suelen ser algo habitual cada cierto tiempo, aunque más breves y/o limitadas en su ámbito geográfico. Sin embargo, esta pasada jornada parecía no acabar en ningún momento, causando consecuencias graves entre la compañía y los usuarios, que dejaron de recibir mensajes.
Este apagón supuso para el fundador Zuckerberg la pérdida de casi 6.000 millones, pero además esta caída evidenció la dependencia que tienen de estas grandes plataformas los más de 3.000 millones de usuarios. ¿Pero qué fue lo que ocurrió?
Un fallo humano
Al parecer, el desastre se produjo durante una rutinaria sesión de mantenimiento de la red por un error humano. Según informa Facebook, ingresaron un comando de configuración aparentemente inofensivo y, contra todo pronóstico, cortaron todas las conexiones en la red troncal, que a su vez desconectó los centros de datos que la compañía tiene repartidos por distintas partes del mundo.
No obstante, para entender mejor el suceso, Esther Paniagua, quien casi vaticinando este pequeño Apocalipsis ha publicado Error 404: ¿Preparados para un mundo sin internet?, explica lo ocurrido de acuerdo a sus conocimientos.
"Fue un fallo humano que se produjo en el momento de actualización de los enrutadores que conectan el contenido de todas las plataformas de Facebook con el resto de Internet", explicaba la Paniagua.
Facebook atacado
Después de este suceso, las redes exentas del dominio de Facebook comenzaron a plantear diversas teorías conspiratorias que apuntaban a un posible ataque cibernético, una opción que, según Paniagua "es totalmente factible", a pesar de que reconoce desconocer las medidas de seguridad que posee la compañía.
En cualquier caso, Facebook optó por desmentir estos rumores asegurando que no hubo intrusión de seguridad o piratería involucrada en aquella caída de las plataformas. Una problemática que, de ser veraz, desencadenaría un grave problema de reputación al que se suma la entrevista de una ex empleada de la compañía donde se hacía responsable de la filtración de documentos.
Frances Haugen denunció las prácticas de la compañía en los medios testificando ante el Senado estadounidense para pedirle que intervenga y que regule la actividad de la multinacional. Haugen, acusa a Facebook de obtener beneficios a costa de la seguridad de sus usuarios. Uno de los ejemplos que menciona es la posesión por parte de la compañía de informes internos que señalan que gran parte de la actividad de la red social de Instagram es perjudicial para los menores.
