Recordamos la catástrofe de Fukushima cuando se cumplen 10 años de aquel episodio de terror. El terremoto de magnitud 9,1 sacudió Japón el 11 de marzo de 2011 y las gigantescas olas provocaron un tsunami que arrasó con todo su paso.
Los que no se hundieron el mar fueron recogidos y con el paso de los años, las regiones afectadas fueron poco a poco reconstruidas. Pero la huella más preocupante del desastre del que hoy se cumplen 10 años es invisible y aún persiste en la región.
Javier Sevillano afirma que la contaminación se ha transferido de los árboles hasta la capa mineral superficial del suelo. El gobierno chino asegura que la zona está descontaminada, aunque Greenpeace , basándose en sus propios estudios y mediciones, asegura que el 85% del Área Especial de descontaminación permanece contaminada y su población, expuesta a niveles de radiación que sobrepasan el límites de 1 microsievert al año recomendado como máximo.