"Un artista pero no de los bachilleres de OT sino un artista de los de antes". Así empieza la descripción del atista que nos trae hoy Ángel Antonio Herrera.
Es un clásico joven y aborrecía este concurso, "lo digo en pasado pero sigue vivo" nos aclara. De la generación de Alsina.
"Es joven de tan antiguo, lo de siempre, lo de verdad, lo que es revolucionario, eso es siempre joven" y así describe a Diego.
ÉL se ha encargado de renovar algunos clásicos de toda la vida y los ha llevado a otro nivel.
Es figura del rastro madrileño y allí le siguen añorando.
En este caso el apodo es casualmente exótico y el pseudonimo es un nombre común pero ese no es su nombre. Así es Diego el Cigala aunque su nombre real es Ramón Jiménez Salazar.