Monika, una niña india de 13 años que evitó ser casada con un hombre mayor gracias a una llamada
Monika vive en un barrio pobre de Bikaner, al noroeste de India. El pasado mes de septiembre, su padre salió temprano de casa, al volver habló con su mujer y sentaron a su hija para darle una noticia: habían encontrado un marido para ella: "Es amable, educado y trabaja como obrero" le dijeron. Su primer instinto fue obedecer pero ella quería estudiar y ser profesora y sabía que si se casaba, dejaría atrás su sueño, y se lo dijo a sus padres.
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Estos decidieron seguir adelante pese a que sabían que ese matrimonio estaba prohibido por ley. El 4 de noviembre, Monika esperaba a ser peinada y maquillada, antes de ponerse su sari granate de boda, como manda la tradición. Había mucho por hacer. Pero a pocas horas de la ceremonia, se escondió para hacer una llamada… Contactó con Childline, una línea nacional de ayuda para niños, y les pidió ayuda para detener el enlace. Aparecieron en el último momento y Mónica sonrió al verles. Se trata de una práctica prohibida en el país desde 2006, pero es donde más casos se producen en el mundo y las consecuencias son nefastas
"Cuando mi segunda hija dio a luz, tuvo muchas complicaciones. Está en tratamiento. Sufre todos los días. Ahora prefiero morir que casar a mi hija pequeña tan joven", asegura a Unicef Chandra, madre de 3 hijas. Según la organización, 12 millones de niñas son obligadas a casarse cada año antes de cumplir los 18. En el caso de Monika, su madre está orgullosa del paso que ha dado… Ella está segura de que hizo lo correcto, quiere que se conozca su historia y sueña con volver al colegio.