Kacey Musgraves, reinó en la 61 edición de los Grammy con cuatro premios, incluido mejor álbum del año, en una gala histórica para Childish Gambino, ganador de otros cuatro galardones, y para la latina Cardi B, primera mujer en llevarse el mejor álbum de rap.
Gambino, el seudónimo por el que se conoce a Donald Glover, fue el otro gran nombre de la noche con sus victorias en las categorías de mejor grabación del año, mejor canción del año, mejor actuación de rap y mejor vídeo, todas ellas por el imponente 'This is America'. Sin embargo, el artista ni actuó ni asistió a la gala.
Lady Gaga brilló con luz propia en las categorías de mejor actuación pop individual ('Joanne'), mejor actuación pop de un dúo o grupo y mejor canción escrita para un medio visual, ambos por 'Shallow'.
"Estoy muy orgullosa de ser parte de una película que aborda los problemas de salud mental. Muchos artistas los sufren. Si lo veis en alguien, no retiréis la mirada. Si sois vosotros quienes los sufrís, aunque sea duro, tratad de encontrar el coraje y decidlo", dijo Gaga, que aspira también al Óscar como mejor actriz por 'A Star is Born'.
Una noche inolvidable resultó también ser para Cardi B, que brilló con su actuación y en su discurso al recibir el galardón por el mejor álbum de rap, 'Invasion of Privacy'. "Estoy muy nerviosa", confesó. "Igual debo empezar a fumar marihuana", agregó entre risas.
Y la gala, que duró tres horas y 40 minutos, contó con la presencia de Michelle Obama y tuvo un gran homenaje a Dolly Parton, echó el cierre con un tributo a la difunta Aretha Franklin.