con pablo sánchez olmos

Crónicas Latinas: Cuba se prepara para los retos en su economía sin dejar de lado los valores de su icónica revolución

En Más de uno nos trasladamos con nuestro corresponsal en Latinoamérica, Pablo Sánchez Olmos, a Cuba para tratar de entender cómo se adapta a la nueva realidad económica que se presenta tras la pandemia.

Pablo Sánchez Olmos

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Con solo 87 muertes y cerca de 2.500 contagiados, Cuba ha logrado superar el coronavirus con mucha más solvencia que sus países vecinos, probablemente favorecida por su geografía o por su solvente sistema de salud. No obstante, lo peor de esta pandemia para la Isla podría no ser el propio virus, sino las consecuencias económicas que ya se están empezando a sentir. En busca de hacerles frente cuanto antes, el gobierno ha puesto en marcha un plan que explicaba así el presidente Miguel Díaz Canel.

Una de esas medidas, con las que se buscaba impulsar la recaudación de moneda extranjera, fue la apertura de tiendas que solo aceptaban dólares y que tenían muchos de los productos que durante meses han escaseado en la isla. Las imágenes de las largas colas que se formaron los primeros días dieron la vuelta al mundo, e hicieron que muchos sospecharan que quizá, la pandemia estaba obligando al gobierno cubano a acelerar la apertura de su economía. No obstante, según confiesa a Onda Cero, Manuel Felipe Lorenzo, corresponsal en Cuba del Periódico Digital Centroamericano y del Caribe, los principios de la revolución no se van a dejar de lado.

La pandemia ha golpeado dos de los pilares fundamentales de la economía cubana como son el turismo y las remesas, por eso Díaz Canel apuesta ahora por el fomento del consumo interno y el apoyo a los trabajadores por cuenta propia. Más allá de los retos del covid, para Manuel Felipe Lorenzo, hay un ingrediente, aún más dañino para la economía cubana y que Donald Trump sigue empeñado en agravar.

Habiendo solventado con eficacia la pandemia, Cuba se prepara ahora para enfrentar grandes retos en su economía que tratará de esquivar sin dejar de lado los valores de su icónica revolución.

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Con solo 87 muertes y cerca de 2.500 contagiados, Cuba ha logrado superar el coronavirus con mucha más solvencia que sus países vecinos, probablemente favorecida por su geografía o por su solvente sistema de salud. No obstante, lo peor de esta pandemia para la Isla podría no ser el propio virus, sino las consecuencias económicas que ya se están empezando a sentir. En busca de hacerles frente cuanto antes, el gobierno ha puesto en marcha un plan que explicaba así el presidente Miguel Díaz Canel.

Una de esas medidas, con las que se buscaba impulsar la recaudación de moneda extranjera, fue la apertura de tiendas que solo aceptaban dólares y que tenían muchos de los productos que durante meses han escaseado en la isla. Las imágenes de las largas colas que se formaron los primeros días dieron la vuelta al mundo, e hicieron que muchos sospecharan que quizá, la pandemia estaba obligando al gobierno cubano a acelerar la apertura de su economía. No obstante, según confiesa a Onda Cero, Manuel Felipe Lorenzo, corresponsal en Cuba del Periódico Digital Centroamericano y del Caribe, los principios de la revolución no se van a dejar de lado.

La pandemia ha golpeado dos de los pilares fundamentales de la economía cubana como son el turismo y las remesas, por eso Díaz Canel apuesta ahora por el fomento del consumo interno y el apoyo a los trabajadores por cuenta propia. Más allá de los retos del covid, para Manuel Felipe Lorenzo, hay un ingrediente, aún más dañino para la economía cubana y que Donald Trump sigue empeñado en agravar.

Habiendo solventado con eficacia la pandemia, Cuba se prepara ahora para enfrentar grandes retos en su economía que tratará de esquivar sin dejar de lado los valores de su icónica revolución.