El dilema moral que los oyentes le han trasladado esta semana a Freire es:
"He descubierto algo horrible del pasado de mi padre. ¿Lo hablo con él o lo dejo pasar?.
Tiene casi noventa años y no quiero darle un disgusto, pero yo tengo derecho a recibir explicaciones. ¿Lo hago? ¿O lo dejo pasar y me quedo con la espinita clavada?".