Los profesores y los claustros tienen la responsabilidad añadida de que las medidas de seguridad se apliquen en todos los centros escolares. Antonio Martínez, director del colegio Juan D’Opazo, en Daimiel cuenta en Más de Uno las razones que les ha llevado a la dimisión.
“A finales de agosto, comunicamos que era imposible en nuestra aula meter juntos a los alumnos cumpliendo las medidas de sanidad, por ello solicitamos un grupo más de primero y de segundo de la ESO, pero no se nos concedió”.
“La solución más rápida era un grupo más y un profesor más (para cada curso), sin embargo, nos enviaron una comunicación donde se nos daba una instrucción única que teníamos que obedecer, que teníamos que atender a todos los alumnos de manera obligatoria. Eso fue el detonante. La solución era no respetar todo nuestro trabajo durante el verano. Sabíamos que podía pasar y ya planteábamos la dimisión si llegaba esta respuesta”.
Lamenta que tras la dimisión, la decisión del Gobierno de Castilla la Mancha haya sido enviar un inspector al centro. "No entendemos que a primera hora tengamos un inspector levantando acta, no creemos que sea la forma de negociar".
Por su parte, Rosa Ana Rodríguez Pérez, Consejera de Educación de Castilla la Mancha, explica que "la inspección va con el ánimo de ayudar". Cuenta que según los datos que tienen del centro, "podrían hacer un nuevo reordenamiento, el centro tiene una serie de espacios donde podrían estar los alumnos de segundo de la ESO". Insiste en que colaborarán con el centro, y que "no es nuestro ánimo perjudicar a ningún centro educativo". Insiste en que “todo es cuestión de la reorganización. Llegaremos a un entendimiento”.
Seguro que te interesa
Testimonios de docentes en el primer día oficial de la vuelta al cole
Dos aulas en dos colegios han tenido que cerrarse por detectar casos positivos de COVID
40 alumnos de dos colegios de Vila-real confinados tras dos casos positivos