La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha explicado en 'Más de uno' el cruce de reproches que protagonizó este jueves en la Asamblea de Madrid con Rocío Monasterio y que terminó con la presidenta anunciando su ruptura con Vox. Ayuso ha dicho que la decisión no responde a una estrategia electoral coordinada con el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, sino que se debe a que ella ya no puede más y quiere "volar libre".
Ruptura con Vox
La presidenta ha comenzado la entrevista diciendo que Vox y el PP de Madrid no son socios porque los 'populares' tienen 65 escaños, y lo que ha hecho con los demás partidos ha sido llegar a "acuerdos parlamentarios, tanto con ellos, como con el PSOE". Reconoce que Vox ha sido siempre el partido con el que más se ha entendido en muchas cuestiones, pero que en los últimos tiempos ha tomado una deriva que no le gusta y por la que no se quiere dejar arrastrar: "Handecidido que soy el enemigo y por delante se llevan todo lo que es bueno para Madrid; aquí no tiene nada que ver con Feijóo, sino con los intereses de la Comunidad de Madrid".
Díaz Ayuso ha dicho que esta decisión no significa que esté en contra ni de los votantes ni de muchos de los diputados de la formación liderada por Santiago Abascal, pero "sí de la deriva que han tomado". Sobre cuál será la respuesta de Vox, asegura que "ellos lo que necesitan es estar en titulares, por lo que ahora, durante unos días, habrá que aguantar lo que digan de que mi decisión tiene que ver con Feijóo. Que hagan lo que consideren, pero la verdad es que no han traído unos Presupuestos trabajados".
A las preguntas sobre si esta ruptura es hasta las elecciones del 28 de mayo, responde que ella no ve la vida "en blanco y negro", pero que le gustaría "volar libre" y gobernar para todos los madrileños de una manera "coherente" y en base a unos principios. E insiste en que esto no responde a una estrategia, ya que ella cree en las mayorías parlamentarias: "Hay mucho en lo que no tengo nada que ver con ellos, pero en otras cosas son coherentes y las he compartido con ellos".
"No voy contra ellas, sólo que ya no puedo más" ¿Y en junio? "Debo de ser el único político al que le gustaría gobernar con mayoría absoluta para tener la libertad de no tener que estar así. Porque por cuatro abstenciones no tengo Presupuestos, ni Ley de Economía Circular, ni Agencia de Ciberseguridad, ni desarrollos urbanísticos. Si ya lo va a pagar Madrid, no es una cuestión de PP-Vox. Yo soy presidenta de la Comunidad de Madrid por encima de cualquier cosa y mi trabajo es gobernar", explica.
"La moción ha tapado muchos titulares. Estábamos con Tito Berni o ahora, al parecer, Tito Patxi"
La presidenta considera apropiada la decisión del PP de abstenerse en la moción de censura de Vox: "Creo que lo mejor ha sido la abstención en una moción que era un sinsentido. No se está a favor del proyecto de Sánchez, pero tampoco de la propuesta de Vox, que era simplemente estar en las portadas. Trabajan poco sin profundizar, por lo que necesitan vivir de portada en portada".
Asegura que la fallida moción de censura ha tapado muchos titulares: "Estábamos con Tito Berni o Tita Berni, o ahora, al parecer, con Tito Patxi".
El problema de la vivienda en Madrid
La presidenta ha dicho que aunque la vivienda "siempre ha sido una gran dificultad", Madrid tiene "la mayor oferta de vivienda protegida que hay en España para jóvenes" y que muchas de las medidas aprobadas por su Gobierno han ido en la dirección de facilitarles el acceso a ella, sobre todo en lo relativo al gran problema que tenían los jóvenes: aportar la entrada para un piso. "Yo no quiero que sea un Madrid en el que los barrios se conviertan en parques temáticos para bancos y turistas, sino que sea para la gente. De hecho, el éxito de Madrid es la mezcla, el mestizaje", asegura.
"El gracioso del presidente invita siempre con el salario de los demás"
No obstante, reconoce que la vivienda "sigue siendo un problema y lo ha sido desde siempre", aunque ahora "el precio se ha contenido". Sin embargo, la presidenta también pide prestar atención, no sólo a los precios de los inmuebles sino al gran problema que tenemos con los salarios, "que hace que sea más difícil para los jóvenes acceder a una vivienda". Por ello, dice que "animaría" a los empresarios a realizar subidas salariales, pero "no de manera forzosa" y teniendo en cuenta que "no es lo mismo una pyme que una gran empresa".
"Pero que no se lo impongan porque el gracioso del presidente invita siempre con el salario de los demás [...]. No hay que ser un hacha para saber que ojalá los sueldos sean más altos", afirma.
Protocolos Covid en las residencias de ancianos
Este jueves, el exconsejero madrileño de Políticas Sociales, Alberto Reyero, y el exdirector general de Coordinación Sociosanitaria, Carlos Mur, testificaron ante un juzgado por los protocolos que impedían derivar a ancianos de las residencias a los hospitales según su grado de dependencia en la primera ola de covid. Sobre esto, Ayuso se refirió en el Pleno de la Asamblea de ayer cuando dijo que esperaba que Reyero acabase "imputado".
La presidenta dijo esto porque "hay que ver qué hizo él, qué responsabilidad tenía", ya que ella no lo sabe, pero, "por prudencia, uno tendría que haber sido más responsable y asumir qué responsabilidad tenía cada uno": "Yo no recibía información sobre lo que él hacía, si había hablado con las familias. Hay que tener en cuenta que tenía un Gobierno en coalición y la competencia estaba delegada".
"Hay que tener en cuenta que en la Comunidad de Madrid no se ha aplicado ni se ha hecho nada diferente a lo que se haya hecho en ninguna otra comunidad. Todo lo que se está hablando es de un protocolo que no se firmó, que se filtró, en el que se estudiaba la posibilidad de que, llegado el caso de que hubiera más fallecidos, cómo se podría organizar la asistencia sanitaria en los hospitales", declara.
Afirma que en aquellos días "moría muchísima gente, especialmente mayores, en toda España, y lo hacían en residencias, en sus casas y en los hospitales". Asegura que muchos geriatras fueron los que tomaron decisiones "sabiendo cada caso de los mayores. En algunas ocasiones, pensaron que era mejor que se quedaran allí, en otros, que fueran trasladados a los propios hospitales". Por eso, concluye diciendo que "ver todos aquellos episodios con las gafas de hoy, sería faltar a la verdad" porque "hay que tener en cuenta en qué circunstancias se dio todo".
Por eso, considera que se puede empezar a hablar del señor Mur, o de Pablo Iglesias, "que también dijo que tomaba el mando único de las residencias". "Aquí todo el mundo se puso muy bravo, pero lo cierto es que hasta que no tomé el mando único y le quité competencias, aquí nadie hacía nada", afirma.
"Tiene que haber libertad para abortar, pero no es un derecho"
La última pregunta a la presidenta ha sido sobre su posición respecto al aborto. Isabel Díaz Ayuso defiende que "sea legal, pero cuando hay personas que recurren a él dos, tres o cuatro veces, entonces tenemos un problema". Asegura que "tiene que haber libertad para abortar, pero no es un derecho" y que le parece un "error" que se promueva "constantemente" y "contra natura decir que es una liberación".
"Yo estoy a favor de la vida, pero también respeto que sea una decisión de cada mujer. Si hubiera un derecho tal cual, habría que obligar a los médicos a ir contra el propio código que estudiaron en Medicina. Tiene que seguir siendo legal y seguro. Yo no dije que fuera un asesinato. Libertad sí, pero derecho no lo veo, aunque no perseguiría a nadie por ello ", reflexiona.