Edmundo Bal, candidato de Ciudadanos para la Asamblea de Madrid, comenta en Más de uno con Carlos Alsina el cambio de discurso en la campaña electoral madrileña tras el debate sobre las cartas amenazantes en la SER. Sobre este viraje en la campaña, donde los partidos de izquierdas sostienen que está en juego la democracia frente al fascismo de Vox, Edmundo Bal critica la situación de crispación generalizada y acusa a Pablo Iglesias de querer polarizar la campaña para obtener rédito electoral.
Bal explica que tenía previsto acudir a los otros dos debates programados para esta semana y mantiene que en esta "guerra de bandos y de trincheras" Ciudadanos puede acoger a todo el que no se sienta identificado en ese discurso. Además, sostiene que "el debate es algo necesario en democracia" y que los políticos deben sentarse y dialogar, al contrario de lo que hizo Iglesias con Monasterio, que decidió no dirigirle la palabra.
"No reconozco a Grande-Marlaska"
En relación a las acusaciones del ministro de Interior, Grande-Marlaska, en las que defendía que en los últimos 26 años Madrid había estado administrado por el gobierno del odio del PP, Bal sostiene no reconocer a Grande-Marlaska, con el que ha compartido durante años trabajo en la magistratura. Además, Bal insiste en que el gobierno de Ciudadanos y el PP "no es un gobierno del odio, sino del milagro económico".
"No negociaría con Vox"
Edmundo Bal mantiene que, en la hipotética situación de ganar las elecciones a la Asamblea madrileña, "no negociaría la investidura con Vox, la negociaría con el PP". Así mismo, considera que Ciudadanos obtendrá más votos de los que le otorgan las encuestas: "Estoy convencido de que vamos a ganar muchos más votos que el límite del 5%".
Con esto, el candidato de Ciudadanos insiste en que su intención es volver a pactar un gobierno con el Partido Popular, puesto que ha sido "el mejor gobierno posible que ha tenido Madrid" y quieren seguir manteniéndolo durante los próximos dos años de legislatura. Bal ha puesto de manifiesto la necesidad de aprobar, junto el PP, los presupuestos generales de la Comunidad de Madrid y acelerar el calendario de la vacunación.
"No soy partidario de cordones sanitarios"
Sobre la idea de crear un cordón sanitario entre algunos partidos para evitar el acceso de Vox al gobierno autonómico, Bal mantiene que no es partidario de cordones sanitarios y hace alusión al espíritu de la Transición, del diálogo y del acuerdo para conseguir hitos históricos: "Si en el 78 hubiese habido cordones sanitarios no tendríamos la Constitución española", explica.
