En junio los ganaderos ya advirtieron de una posible escasez de pollo y leche si el incremento de los costes de producción no se reflejaba en el producto. De cara a septiembre, se esperan posibles movilizaciones por el alza de los precios en determinados sectores.
La Unión de Pequeños Agricultores (UPA) denuncia que los productores de pollos no ven aplicada la subida de precios en sus beneficios, mientras que ese incremento del precio sí se nota en el producto final que se vende en los mercados y supermercados.
Ramón Santalla, secretario de ganadería UPA, confirma en 'Más de uno' que, si la situación no cambia, podríamos encontrarnos en septiembre con protestas del sector agrícola y ganadero.
"La situación es asfixiante"
"La situación es asfixiante por la cantidad de energía que tenemos que gastar para climatizar nuestras granjas", denuncia Santalla quien asegura que ningún granjero ha visto reflejado en su sueldo la inflación de precios.
Por ello, los ganaderos avisan de que "en otoño podríamos tener problemas", pues será entonces cuando se junte el gasto energético actual y el gasto del combustible para calentar las granjas.
Cuando eso ocurra, "no vamos a ser capaces de seguir criando pollos porque es asfixiante en términos económicos" y los productores como él, no tendrán capacidad económica suficiente para hacer frente a esos gastos.
Los ganaderos ganan lo mismo que hace quince años
Actualmente, un granjero por kilo de pollo está recibiendo de media entre 15 y 16 céntimos, esto es "lo mismo que recibía hace diez o quince años, pero con un aumento delos costes de producción que se han multiplicado o triplicado".
En definitiva, Santalla insiste en que "nuestros granjeros se están asfixiando económicamente mientras algunos están ganando dinero", dice en alusión a las grandes empresas productoras de pollo y pienso y a las empresas distribuidoras.
Críticas al ministerio por "estar de perfil"
Por su parte, el ministerio de Agricultura se ha puesto en contacto con los ganaderos para reunirse y tratar de encontrar una solución al problema, ante un posible desabastecimiento en otoño.
Sin embargo, el secretario de UPA, critica: "el ministerio no debiera estar de perfil ni de vacaciones ante un problema tan grave" que afecta a un sector estratégico en la alimentacion
Por último, Santalla evita hablar de desabastecimiento, pero advierte de un "desajuste" en la producción de pollo, que escasea en el mercado.