El nombre propio del día es Edmundo González Urrutia. El pueblo venezolano lo votó para presidente de la república y ha acabado de asilado político en España. Se comunicó en la mañana de ayer que se le había concedido el asilo y alrededor de las 4 de la tarde aterrizó -junto a su mujer- en la base aérea de Torrejón de Ardoz, en Madrid.
A pesar de que el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha negado contactos con el régimen chavista, la vicepresidenta Delcy Rodríguez dice que "la falsaria no es buena consejera", en respuesta a las declaraciones de Albares, y que sí que hubo relaciones y conversaciones entre los dos gobiernos para darle a González Urrutia el salvoconducto para salir del país
Niega que haya habido una negociación política con el gobierno venezolano
Ante estos rumores, el ministro insiste en repetir de forma clara que "los únicos contactos que ha habido han sido de tipo operativo", pues para que aterrice en Caracas un avión de la fuerza aérea española, "era necesario tener una autorización del gobierno venezolano".
No ha habido ninguna negociación política entre el gobierno de España y el gobierno de Venezuela
José Manuel Albares desmiente así a Delcy Rodríguez: "No ha habido ninguna negociación política entre el gobierno de España y el gobierno de Venezuela. Es decir, no ha habido ninguna contrapartida para que Edmundo González pudiera salir".
La única conversación que Albares ha tenido fue con Edmundo González para asegurarse que quería venir a España y solicitar asilo. Fue en ese momento cuando el ministro le aseguró que "íbamos a hacer todo lo necesario para que viniera", y si por el contrario quería seguir en Venezuela, "podría seguir en la residencia del embajador de España tanto como quisiera".
El gobierno de España nunca aceptaría exigencias de Venezuela
En definitiva, José Manuel Albares niega que el gobierno de España haya aceptado condición alguna o exigencia por parte del gobierno venezolano para hacer posible la llegada a nuestro país del opositor Edmundo González.
"Ni las hubiéramos aceptado nunca, ni se nos han planteado. La única conversación que he mantenido con alguien ha sido con Edmundo González" para que le confirmase su voluntad de desplazarse hasta España.
España no va a reconocer la supuesta victoria de Maduro
Con todo, el ministro vuelve a aclarar que la posición de España sigue siendo la misma con Edmundo González en Caracas o en Madrid.
No vamos a reconocer la supuesta victoria de Nicolás Maduro. Queremos que se entreguen las actas
"No vamos a reconocer la supuesta victoria de Nicolás Maduro. Queremos que se entreguen las actas", dice Albares defendiendo una de las líneas rojas para el gobierno, que pasan por "proteger los derechos políticos de los venezolanos" y especialmente de sus líderes políticos y su integridad física.
Una situación humanitaria y política muy extrema
La política exterior es en muchas ocasiones un dilema moral en el que hay intereses contrapuestos en juego. En el caso de Edmundo González, "había una situación humanitaria pero también política". Por eso, era necesaria su salida de Venezuela para garantizar su seguridad.
"Estamos hablando de una situación humanitaria muy extrema y de defender los derechos políticos y la libertad de expresión de Edmundo González", cuenta Albares sobre la petición de asilo.
Por último, el ministro traslada el mensaje: "España no le va a cerrar nunca la puerta a un hermano latinoamericano que lo necesite en una situación como esta", e insiste "con Edmundo González en Madrid, la posición del gobierno de España sigue siendo exactamente igual [...] No cambia absolutamente nada y no vamos a hablar más bajo sobre lo que queremos para Venezuela, que es que avance la democracia".