Este lunes es el último día para publicar sondeos antes de las elecciones municipales y autonómicas del próximo domingo. Esta norma obsoleta de prohibir difundir encuestas electorales durante la semana antes de los comicios, se debe a "un sentido paternalista de proteger al ciudadano" y como copia de otros países, explica en 'Más de uno' el presidente de Metroscopia, instituto de sondeos políticos y estimaciones electorales, Juan José Toharia.
Sin embargo, los partidos siguen haciendo sus propias encuestas internas y algunas noticias de última hora pueden incidir en la decisión de los electores. Por todo ello, esta es una medida "anacrónica" que considera al ciudadano como "un ser vulnerable, maleable y totalmente controlable", sostiene Toharia.
Las encuestas influyen poco en la decisión de los votantes
Al contrario de la creencia generalizada, estas encuestas influyen poco en la decisión de los votantes. "La encuesta no es un instrumento para influir en la gente, sino que es un instrumento para hacer fotografías de situación" y para que las utilicen quienes tienen que tomar decisiones, dice el presidente de Metroscopia que se considera un "fotógrafo callejero".
Los sondeos, en definitiva, son "sondeos en el camino de la ciudadanía" donde se reflejan los estados de ánimo. Por tanto, "nosotros no predecimos, podemos interpretar o describir lo que ocurre", asegura Toharia.
Bill Clinton, el político que mejor ha utilizado las encuestas
Los políticos que mejor han sabido utilizar los sondeos de opinión han sido Toni Blair y Bill Clinton, quien durante los dos primeros años de su mandato realizó encuestas semanales "para conocer dónde estaba el pueblo americano".
Al final del segundo año, hizo un discurso del Estado de la Nación -que normalmente la gente ignora- que fue histórico porque arrasó en audiencia. Clinton, entonces, supo dirigirse a los norteamericanos en el tono que esperaban y tocar los temas que les interesaban.
Las encuestas no sirven para descubrir qué es lo que hay que decir, sino cómo hay que dirigirse y qué temas hay que tocar
Esto refleja que "las encuestas no sirven para descubrir qué es lo que hay que decir, sino cómo hay que dirigirse y qué temas hay que tocar". Pero por lo general están mal utilizadas y dirigidas, lo que crea mala fama entre aquellos que se dedican a realizar encuestas electorales.
La polémica de Bildu no va a producir un vuelco electoral
Con todo ello, los hechos que se producen a lo largo de las campañas electorales no tienen tanta repercusión en el electorado como se piensa. En el caso de las polémicas listas de Bildu, ha incitado aún más a un electorado y ha hecho más incómodo a otro, pero "de ahí a decir que se va a producir un vuelco electoral, pues no se va a producir", vaticina Toharia.
Hay una tendencia de cambio clara, pero no va a ser un tsunami
Las del próximo 28 de mayo son unas elecciones muy competitivas, pues en varios ayuntamientos o parlamentos autonómicos el gobierno depende de un puñado de votos. Sin embargo, "las grandes líneas ya están trazadas". Por ello, los titulares del próximo lunes tras las elecciones diferirán muy poco de las encuestas actuales.
No cometer el error de ver estas elecciones en clave nacional
Lo que advierten todos los sondeos es que "hay una tendencia de cambio clara". Sin embargo, ese cambio "no va a ser un tsunami" porque todos cometen el error de intentar, a través de las elecciones municipales y autonómicas, entrever los resultados de las elecciones generalesde diciembre.
"A partir de junio veremos con más claridad lo que pueda pasar en las generales. Ahora de lo que va es de las autonómicas y municipales", insiste el presidente de Metroscopia.