Tras ganar por diecisiete puntos a Susana Díaz en las primarias del PSOE andaluz, el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, se convirtió hace un mes en el secretario general socialista de Andalucía. Con este cambio en la dirección política, Espadas apuesta por el diálogo con el PP de Moreno Bonilla para evitar que el Gobierno andaluz siga siendo "un rehén del chantaje de la extrema derecha andaluza".
Posible apoyo a los presupuestos andaluces
El PSOE andaluz, partido mayoritario en la oposición, busca ser tenido en cuenta en el Parlamento a la hora de llegar a acuerdos importantes con el Gobierno autonómico. En esta línea, Espadas confirma su voluntad de diálogo sobre los presupuestos y deja la puerta abierta a apoyar los presupuestos regionales ante la hipotética negativa de apoyo de Vox. "El PSOE está dispuesto a hablar para conseguir que lo que pase en los próximos meses en Andalucía sea lo mejor para los andaluces", declara el secretario general.
Ante el hipotético apoyo a los presupuestos y el rumor del posible adelanto electoral en Andalucía, Espadas asegura: "No vamos a apoyar unos presupuestos para evitar que haya unas elecciones". En caso de dar su apoyo a dichos presupuestos, será porque éstos beneficien a todos los andaluces. Asimismo, insiste en la necesidad de dejar los "cálculos electorales de lado" y centrarse en la gestión de la recuperación económica
Cambios en el PSOE andaluz
Los días 6 y 7 de noviembre se realizará un Congreso para refrendar el equipo y la ejecutiva regional que lidere la nueva etapa del PSOE de Andalucía. Por el momento, se está realizando "un proceso interno de escucha activa" para analizar las necesidades no cubiertas por el Gobierno andaluz. Como secretario general, Espadas busca colaborar y "hacer una oposición constructiva que permita recuperarnos de esta terrible crisis".
Espadas admite la necesidad de un cambio en el PSOE andaluz enfocado en trabajar diariamente "por la gente" escuchando críticas y exponiendo soluciones. Dichos cambios van por "humanizar la política" y acercarse a los problemas de la gente: "La política tiene que ser más próxima al día a día y alejarse de las broncas", sostiene.
