El verano es sinónimo de vacaciones de casi tres meses para miles de estudiantes. A estas alturas de junio, muchos ya han recibido sus notas y han conseguido graduarse. Uno de esos miles de estudiantes recién graduados es Luis Martín Montejo, que a sus 87 años, acaba de sacarse el Bachillerato de ciencias.
Tuvo que ponerse a trabajar a los 14 años
"Lo había querido hacer antes pero por circunstancias familiares, no pude", cuenta en 'Más de uno'. De pequeño tuvo que faltar a la escuela por una enfermedad en el pulmón y con 14 años se tuvo que poner a trabajar para ayudar económicamente a su familia.
A los 16 años empezó a trabajar en la industria haciendo piezas para la estructuras de los barcos y, más adelante, logró entrar en la oficina técnica donde dibujaba las estructuras de los barcos. Por este motivo, su asignatura favorita durante el Bachillerato ha sido la de dibujo.
Comenzó a estudiar para evitar perder la memoria
Ya de mayor, decidió empezar a estudiar con 74 años, cuando empezó a darse cuenta de que le comenzaba a fallar la memoria. En ese momento, se dio la casualidad de que le ofrecieron un curso para la recuperación de memoria en su localidad, Sodupe, en Vizcaya. Cuando acabó ese curso, le animaron a hacer la ESO y, después, "me aconsejaron seguir estudiando Bachiller", dice Luis.
Durante el tiempo que ha estado estudiando Bachillerato, "también he tenido que cuidar nietos" y ser el administrador de su edificio, donde tuvo que supervisar la instalación del ascensor.
Continúa trabajando en nuevos proyectos
Ahora que ha terminado el Bachillerato, está preparando los apuntes para que puedan servirles a sus nietos de diez y once años; "quiero que a ellos les sea más fácil que a mí", explica. Además, está trabajando en el diseño de un aparato que, aprovechando la fuerza de la gravedad, sirva para estar generando energía continuamente.
