El excomisario Villarejo fue puesto en libertad provisional ayer, después de estar tres años y cuatro meses en prisión preventiva en la cárcel de Estremera. María Jesús del Barco, jueza decana de Madrid y portavoz de la Asociación Profesional de la Magistratura (APM), explica que la decisión tomada por el juez Manuel García Castellón era “inevitable”, después de que la Fiscalía recurriera la resolución de la Audiencia Nacional solicitando la libertad, a lo que la propia sala dijo que no.
La Audiencia Nacional ya dictó que Villarejo debía quedar en libertad por el tiempo que llevaba en la cárcel de manera preventiva, puesto que el máximo son cuatro años y el ordenamiento jurídico prevé otras medidas que tratan de asegurar la presencia del acusado en un procedimiento. Del Barco asegura que en el auto dictado ayer por el juez García Castellón se han puesto en marcha todas las medidas restrictivas de la libertad ambulatoria de Villarejo para evitar su fuga.
En este momento, la Fiscalía prefiere no agotar la prisión preventiva porque, si en el juicio de diciembre fuese condenado el comisario Villarejo, al no ser la sentencia firme, el riesgo de fuga aumentaría. Es decir, al verse condenado, Villarejo podría tener más tentación de abandonar el país.
Por tanto, en ese momento sí se podría pedir su ingreso en prisión, en la medida en que aún no tiene cumplidos los cuatro años de prisión provisional máxima. Así, “dejamos unos meses guardados en la trastienda por si fuera necesario utilizarlos”, comenta del Barco.
En una entrevista en Televisión Española Irene Montero habló sobre su proyecto de ley del consentimiento sexual, la ministra de Igualdad comentó: “Lo curioso es que nos preguntemos cómo se prueba si hay o no consentimiento, pero en un robo en el que sólo están presentes la persona a la que han robado y la persona que roba, nadie se pregunta, en ese caso, si ha habido un robo o no, se asume directamente que la persona que denuncia el robo tiene razón".
En relación a esta declaración, del Barco comenta: “Irene Montero o peca de ignorancia o quiere mentir descaradamente a los ciudadanos” y explica que en todos los delitos hay que acreditar la culpabilidad de la persona acusada.
Además, el código penal ya castiga los delitos contra la libertad sexual en los casos donde no hay consentimiento de la víctima. “Si no hay consentimiento existe un delito contra la libertad sexual, que será un abuso o una agresión”, declara la jueza decana.