La Presidencia argentina reaccionó con virulencia contra el presidente español, Pedro Sánchez, en un comunicado de "repudio" por unas declaraciones del ministro de Transporte y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, contra Javier Milei,
Todo comenzó este viernes, cuando Puente participó en Salamanca en un evento sobre redes sociales, en el que dijo que había visto al libertario efectuar unas fuertes declaraciones en campaña electoral "cuando salió no sé en qué estado y previa a la ingesta o después de la ingesta de qué sustancias", sin dar más detalles.
La respuesta del ministro de Interior de Argentina, en Onda Cero
En declaraciones a Más de uno, el ministro de Interior de Argentina, Guillermo Francos, ha rechazado estas afirmaciones del titular de Transportes español y ha señalado que "el presidente Milei no toma una gota de alcohol" y que por tanto atribuirle la ingesta de "sustancias" sólo entra en la "en la mentalidad de un energúmeno".
Insiste Francos en que las palabras de Puente no tienen nada que ver con la realidad y que parecían la representación de un espectáculo de humor.
Apunta que si fuera el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, le habría pedido inmediatamente su renuncia a Óscar Puente por esta actitud y es precisamente esto lo que más le llama la atención, que Pedro Sánchez, "ante una injuria contra un presidente de una república hermana" no haya reaccionado y le haya exigido pedir disculpas y abandonar el gobierno.
También se ha pronunciado Francos sobre el comunicado del gobierno argentino en el que además del "repudio" por estas palabras aprovechaban para atacar a Sánchez diciendo que "tiene problemas más importantes de los que ocuparse, como las acusaciones de corrupción que caen sobre su esposa (Begoña Gómez), asunto que lo llevó incluso a evaluar su renuncia".
En este caso resalta que él no redactó esa nota y que no se habría metido "con los problemas privados del presidente español".
