La huelga convocada por Renfe y Adif en protesta por el traspaso de Rodalies a la Generalitat de Cataluña para hoy viernes fue desconvocada en la tarde de ayer tras horas de negociaciones con el Ministerio de Transportes.
El Ministerio encabezado por el exalcalde de Valladolid, Óscar Puente, se comprometió a que en la negociación con la Generalitat para el traspaso del servicio de Cercanías participarán los trabajadores y se tendrá en cuenta sus posturas. Además, confirmó que se respetarán los derechos socio-laborales de todos los empleados de las compañías.
Los sindicatos serán parte del proceso de negociación
El secretario general del sindicato UGT, Pepe Álvarez, explica en 'Más de uno' los detalles de la negociación con el Gobierno, donde en todo momento manifestaron que "los trabajadores teníamos que ser parte del proceso de negociación" para salvaguardar los intereses de los trabajadores de Renfe y Adif y el propio funcionamiento del sistema, pues "el traspaso integral de todas las líneas es una cuestión técnicamente, si no imposible, compleja y anormal en los sistemas ferroviarios europeos".
La última cuestión a tratar tenía que ver con que "el proceso de construcción de una nueva compañía es para mejorar las cercanías y las cercanías de Barcelona sobre todo lo que tienen es un problema de inversión en infraestructuras".
Celebra el fin de la huelga pero si no se cumplen las condiciones "volverá el conflicto"
En la reunión, se pudieron hablar de estas cuestiones y, "si no hay posibilidades de que las aspiraciones de los trabajadores de Renfe y Adif queden plenamente cubiertas" -así como de los usuarios de cercanías de Barcelona- "volverá a haber conflicto", avisa Álvarez. Sin embargo, considera que "es bueno lo que se ha hecho" y asegura que "personalmente, no soy partidario de las huelgas preventivas".
Como líder de la UGT muestra su preocupación por la unidad de empresa y "por las condiciones de trabajo de los trabajadores y trabajadoras, no sólo de carácter económica, sino de movilidad o ascensos". Se trata de un tema mucho más complejo de lo que parece, por lo que hay varias cuestiones que deben estar presentes en la negociación.
Álvarez pone en duda el traspaso integral de Rodalies
Al respecto del traspaso integral de Rodalies a la Generalitat de Cataluña, Pepe Álvarez asegura "tener la sensación" de que no será así, aunque es consciente de que "hoy las palabras se utilizan y se dan la vuelta".
Por ello, considera que se trata de "la integralidad que permite un sistema que tiene una ley que lo regula, por lo que habría que cambiar la ley, y con unas directivas europeas que hay que cumplir".
La subida del salario mínimo "es un tema resuelto con la patronal"
El PSOE y sus socios -en especial, Sumar- tienen el compromiso de que, por ley, siempre tenga que actualizarse el salario mínimo interprofesional de manera que nunca esté por debajo del 60% del salario medio. Algo que se viene haciendo los últimos años, pero ahora se busca "blindarlo" para que independientemente del signo político del Gobierno, esto se cumpla.
Además, está la negociación con la patronal sobre cuánto tienen que subir los salarios mínimos el próximo año, algo que está pactado desde el año pasado por una vigencia de tres años. Para el 2024 la previsión es que el salario mínimo aumente un 3%, más un 1% si se dispara la inflación, y el 2025 tiene la misma previsión.
"El 2023 lo vamos a acabar con un aumento de salario por encima del 4%, por lo que este es un tema que tenemos resuelto con la patronal", comenta Álvarez, quien critica que todavía se desconoce qué estadística se usa para situar el salario medio de España.
En definitiva, los sindicatos van a la mesa de negociación para subir el salario mínimo "con un criterio muy claro", pues tiene que tener en cuenta que "la inflación está disparada" y que "los precios de los productos que más consumen las personas regidas por el salario mínimo son los que más han subido".
