A Vanesa Fernández le diagnosticaron esclerosis múltiple con 25 años, desde entonces su vida no ha vuelto a ser la misma. La esclerosis es una enfermedad autoinmune, degenerativa y sin cura que afecta al cerebro y a la médula espinal, la llaman la enfermedad de las mil caras, no hay dos pacientes iguales ni con los mismos síntomas, a cada persona le dan brotes diferentes que le pueden afectar al habla, al caminar, a la visión, dolores en extremidades.
Además, se considera como una de las enfermedades invisibles porque la fatiga crónica, que es uno de los efectos, no se ve y provoca cansancio extremo. Aparentemente parece que están bien pero también tienen una discapacidad.
Vanesa explica en Más de uno que su primer síntoma fue un cosquilleo en la mano derecha, por lo que no le dio importancia hasta que se le durmió completamente la mano. "Ahí es cuando empiezas a ir al médico", dice.
Asimismo, confiesa que "lo pasas mal y al principio te causa mucho shock", aunque ahora asegura que ha aprendido a vivir con la esclerosis y, a pesar de tener cansancio crónico, intenta llevar una vida normal, aunque no puede realizar tareas cotidianas, como hacer la casa.