Hablamos en Más de uno sobre las familias de acogida que recogen a los MENA africanos que llegan en pateras a Canarias. El año pasado fueron más de 745 embarcaciones con 23 mil personas, las que desembarcaron en las costas canarias y de ellos, más de 2.000 eran niños que viajaban solos. Ahora, estos niños encuentran un hogar, aunque sea pasajero, gracias a familias que están inscritas en la bolsa de padres de acogida de la Consejería de Asuntos sociales del Gobierno de Canarias. Es una situación de provisionalidad en la que, muchas veces, se generan lazos afectivos.
Charlamos con Francisco Sánchez, guardia civil de El Hierro, que, aunque ya tiene dos hijos, ha acogido a una de estas niñas. "No tenemos mucha información de su familia, ni siquiera la fecha de nacimiento", explica. Además, añade la dificultad principal fue que "cuando llegó, la niña no hablaba castellano y pedía las cosas como podía, ahora comprende todo perfectamente". Por otra parte, relata que su familia les ha ayudado un montón en todo el proceso e incluso su padre le dijo que "para él, era como su nieta".
Víctor, otro padre de acogida de un pequeño de 11 años de Costa de Marfil, comenta que "la pandemia retrasó mucho que este proceso pudiera prosperar". Además, explica que para él y su mujer "ha sido un despertar de sensaciones" porque no tenían hijos biológicos. "Se nos ha complicado todo para bien", argumenta. También ha detalla que "en el proceso de formación te explican que el acogimiento es algo temporal, pero el vínculo que se va formando va a hacer que la despedida sea mucho más dolorosa", concluye.
